Por suerte al jefe le habían gustado la mayoría de las fotos, así que no tardó en decidirse cual pondría.

-Bien muchacho, lo hiciste bien- dice felicitandolo, estaba asombrado por las fotografías que había tomado, lo podía ver en sus ojos.

-Gracias, señor- respondió Dylan con sarcasmo, fue algo así como 《Lo se, es a lo que me dedico》

Salimos de su oficina en dirección a la mía, Dylan quería saber lo que había sucedido afuera del gimnasio, que fue lo que pasó para que me ponga de esa manera.

Tomo asiento en frente de mi, observando cada movimiento, analizandome. 

-¿Qué buscas?- pregunte curiosa.

-Tus factores,- dijo sin rodeos- se que cuando mientes te pones nerviosa, mojas tus labios, tragas saliva- él estaba seguro de lo que estaba diciendo, como si nos conociéramos hace años- al entrar a ese gimnasio hoy supe que había incomodidad en ti, te rascabas el brazo, te acomodabas el cabello y mirabas a todos lados. Cruzaste palabras conmigo. Cruzaste