56. Soy todo tuyo, Mila
56. Soy todo tuyo, Mila
⤝MILA⤞
Un gemido abandona mis labios al sentir la rodilla de Axel abrirse paso por mis piernas. Enredo mis dedos entre sus cortos cabellos, presionando un poco para profundizar el beso.
El deseo corre por mis venas como un mar de fuego ardiente; no soy consciente de lo mucho que extrañaba perderme entre sus brazos hasta este momento. Mi cuerpo reacciona a su calor como una barra de mantequilla sobre la sartén caliente.
¡Me estoy derritiendo!
Así, sin separarnos y con pasos torpes, caminamos a la habitación; sin embargo, nos detenemos antes de entrar. Protesto cuando la boca de Axel abandona mis labios. Nuestras miradas se encuentran y no puedo evitar buscar un atisbo de duda en sus ojos o quizá ha pensado mejor las cosas y prefiere que hablemos sobre lo que hemos querido ignorar.
No obstante, en esa mirada oscura y penetrante no hay más que una pasión arrolladora que prende cada rincón de mi ser. Una necesidad que no puedo ignorar, con la que no deseo luchar.
É