Por otro lado, en la empresa Petrovic las cosas estaban movidas ya que estaban empezando a preparar la pequeña colección para el verano.
En esos momentos Débora llegaba a la empresa y era ayudada a bajar del vehículo por su amado.
- Mi amor ¿estarás bien? - preguntó el rubio.
- Si, ya le avise que l