Pasaron horas mirándose el uno al otro, no existen palabras que decir y Khan agradecía de manera interna que ella no preguntara más de lo normal y que ignorara el tema anterior.
—¿Debo irme? —pregunta.
—Puedes dormir conmigo, —murmura, Khan le da una sonrisa y sale de la cama—¿Qué haces? —pregunta.
—Preparándome para dormir, —responde.
—¿Dormirás desnudo?
—En bóxer, pero si deseas me lo quito, —suelta sonriente, Esmer se cubre de pies a cabeza y el rubio decide tomarlo como una afirmación.
Khan se desnuda y se me