Cecilia

Esto era lo que me faltaba, que mi hermana se metiera en mis asuntos cuando no ha querido saber de nosotras en años, por no decir desde que se enteró que estaba embarazada.

Pero veamos de que se trata todo esto, si de verdad quieren decirme algo entonces voy a escucharlos pero no me van a detener por nada del mundo.

—Buenas días Cecilia, un gusto verte de nuevo.

—Me encantaría decir lo mismo pero me temo que no es el mejor momento joven Gotti.

«Muy bien, en perra amiga, en perra»

—Tienes toda la razón del mundo Cecilia, pero antes de estar enojada conmigo preocúpate por tu propia familia.

—Yo me ocupo de mi familia, no tienes porque venir a decirme lo que tengo que hacer. No eres nadie para eso.

—Lamento decirte que estas muy equivocada, el hecho de que esa niña sea una Gotti me inmiscuye en todo lo que le pueda pasar; si tú no quieres nuestra ayuda es aceptable pero no puedo dejar que mi sobrina esté en peligro todo por un berrinche de tu parte, ahora entiendo porque m