_¡Eres un mentiroso! ¡Sabes que jamás le robaría a la compañía de la familia!_ Le grita Christopher a Franco con todas sus fuerzas.
_Tengo las pruebas, aquí están, nada es inventado, y para tu conocimiento, no solamente tengo el comprobante del banco ¡Ah no! Tengo también la prueba que has pasado compras falsas como reales, aquí tengo los documentos que lo afirman_Le responde Franco_ Levantándose del piso.
_Esto es algo que nunca pensé que ocurriría en la familia, me siento tan avergonzada_ Dice Doña Carlota con tristeza.
_Abuela, yo no sería capaz de hacer algo así, todo es una mentira_ Se defiende Christopher.
_¿Así? ¿Una mentira? ¡Mira querido sobrino! Aquí tengo el comprobante que tú pasaste más de 20 millones de dólares a una cuenta personal en la Bahamas ¿Cómo puedes justificar algo así?.
Christopher no entendía nada, no se explicaba ¿Cómo existía una cuenta a su nombre en las Bahamas? No se explicaba ¿Cómo el dinero de la compañía terminó en esa cuenta?.
Él se sentía confundido