~Sebastián~
No podía sacarme de la cabeza aquella mirada triste de Scar.
Cuanto más intentaba entenderla y sentirla, más me daba cuenta de lo imposible que era enmendar las cosas. Creí que defendía mi límite como esposo cuando estaba con Ava, pero no vi que cada minuto que estuve ausente fue carcomiendo el cariño, la confianza y la felicidad de mi esposa.
Ella me amaba cuando nos casamos, pero esa chispa en sus ojos se apagó. Luego desapareció la luz de felicidad cuando me veía, hasta que la confianza en su mirada fue reemplazada por decepción.
La misma decepción que vi hoy cuando la dejé en nuestra habitación.
Y apenas estaba empezando a sonreírme otra vez.
Ni siquiera me atrevía a imaginar el valor que le tomó contarme lo de nuestro bebé. En ese momento no vi la felicidad de tener el fruto de nuestro matrimonio creciendo dentro de ella. No vi la emoción de una mujer viviendo su primer embarazo. Solo vi miedo en sus ojos. cuando me dio la noticia de nuestro bebé por primera vez.
No me