Tang Ruochu solo vaciló brevemente antes de mostrar una sonrisa brillante y asintió con elegancia. "Sí, de hecho, quiero que me ayudes".

Lu Shijin la miró con una leve sonrisa, y le dijo: "Pero escuché de Shengyao que no querías pedir mi ayuda".

Tang Ruochu frunció la boca y respondió: "No quería tu ayuda con el problema del viejo Chen. Pero ahora necesito que me ayudes con algo diferente".

"¿El viejo Chen?".

"Sí, él es uno de los accionistas del Grupo Tang. Fui a visitarlo hoy con Shengyao, pero simplemente se negó a dejarnos entrar".

Mientras hablaba del viejo Chen, Tang Ruochu no pudo evitar dejar escapar un suspiro, sintiéndose un poco decepcionada.

Al ver su decepción, Lu Shijin pensó por un momento y dijo: "Dado que su actitud es neutral, al menos significa que todavía tienes una oportunidad".

"Exactamente, eso es lo que pienso yo también". Tang Ruochu puso sus hermosos ojos en blanco, que brillaron de manera astuta, y continuó diciendo: "Conócete a ti mismo, conoce a tu