Johan no podría notarlo, pero Ana estaba entre lágrimas, después de escuchar el relato de toda su vida, y subconscientemente había susurrado “lo sé”, cuando se dio cuenta de su error, rápidamente cambió el tema, preguntando sobre su mayor deseo, y cuando escucho su respuesta, todo su rostro se había puesto rojo, ella no esperaba esta respuesta.

La historia de Johan había durado mucho, y ya era tarde por la noche cuando Ana se despidió de él.

En silencio me digo a mí mismo: “Ana es realmente amable, me pregunto, ¿Cuál será su mayor deseo? Después de esto, ya ha pasado tres días y Ana no ha vuelto desde entonces, creo que la he ofendido con mis últimas palabras, “no debí haber dicho aquello”, quizá se molestó conmigo y ya no venga a verme, estoy realmente arrepentido.

Cuando pregunto a las demás enfermeras, simplemente no me dicen nada, es como si trataran de ocultarme algo.

Dos días después y Ana aún no ha vuelto, creo que realmente la he molestado con mis estúpidas palabras, ¡ah!, que tonto fui al decirle eso, si tan solo me hubiera callado, quizá ella aún estuviera visitándome.

Johan no sabía que todos estos cinco días, Ana siempre estuvo con él, observándolo en silencio desde la puerta, la razón por la que las demás enfermeras no le dijeron nada sobre ella a Johan, se debió a una petición suya.

En este momento, Ana susurra muy apagadamente: “Adiós, esta será la última vez que te vea”, con eso, no pudo evitar que las lágrimas se deslizaran sobre sus rosadas mejillas, tomando una decisión en su corazón, se va en dirección a la oficina principal del hospital.

Dentro de la oficina está el Doctor Elías, el médico de mayor capacidad de todo el hospital, y alguien realmente famoso y un hombre realmente importante en el campo medicinal, pero cuando Ana ingresa, incluso alguien como el Doctor Elías se levanta apresuradamente para saludarla, Ana asiente y lo mira con una cara seria.

Después de decidirse, ella dice: “Dr. Elías, estoy determinada, hagamos esto, ya lo he pensado lo suficiente, y estoy decidida”.

El Dr. Elías responde nervioso: “pero señorita Ana, si me permite, aún hay tiempo para seguir pensando, no es que su amigo se esté muriendo, esto….

Ana levanta la mano y lo detiene: “Dr. Elías, no hay nada más que pensar, por favor, simplemente hágalo”.

El Dr. Elías solo pudo sentirse impotente y estar de acuerdo, aunque aún sentía que Ana se estaba precipitando, solo podía obedecer, también sintió celos por Johan.

Por la mañana al día siguiente, Johan se encontraba desayunando cuando de repente el Dr. Elías se le acerca y le da una gran noticia, había encontrado un donante, con esto, Johan podría recuperar la vista, y Johan naturalmente estaba feliz, no vio nada extraño en esto.

Johan estuvo de acuerdo de inmediato, con esto, podría ver cómo era el rostro de Ana, incluso paso por su mente, de que había sido Ana la que había encontrado este donante, quizá por ello no lo había vuelto a visitar, estaba tan ocupada buscando un donador, pero en este momento, el Dr. Elías tenía la cara oscura y miraba a Johan con resentimiento.

09:30, empieza la operación, este proceso no duró mucho tiempo, después de media hora la operación fue un éxito, y un par de horas de descanso, Johan estaba a punto de quitarse las vendas para ver el mundo lleno de colores, la operación duró un poco más del tiempo habitual, esto fue porque habían realizado una operación riesgosa, esto fue un trasplante completo del globo ocular, pero con las grandes capacidades del Dr. Elías, esto fue posible.

Y lo increíble para todos fue que esto fue un total éxito, solo el Dr. Elías podría lograr esta hazaña, cuando Johan se quitó las vendas vio un nuevo mundo, en un mejor sentido se podría decir que volvió a ver el antiguo mundo de m****a en el que vivía antes, solo que esta ves tenía más colores profundos.

Después de que mi operación fuera un éxito, lo primero que hice fue preguntar por Ana, no me importaba como me veía, solo quería verla lo antes posible, tenía miedo de que mi vista volviera a fallar y la perdiera nuevamente antes de poder verla.

Tenía miedo por alguna razón, quería levantarme de inmediato de esta silla de ruedas en la que estaba sentado, pero aún no podía, mi cuerpo aún no estaba recuperado, peor aún mis piernas.

Maldije mi suerte, pero aun así insistí en preguntar por ella, pero nadie me respondió, de hecho, en ese momento fue que me enteré de que Ana, nunca fue una enfermera del hospital, mucho menos nunca trabajó en este hospital de último nivel.

El hecho de enterarse de que Ana no fuera una enfermera del hospital, afectó mucho a la actitud de Johan, pero también se sintió estupefacto al enterarse de que este era el hospital de mayor nivel de todo el país.

Según los conocimientos de Johan, él no tiene el dinero suficiente para pagar este tipo de lugar, él creía que estaba en el pequeño hospital en el que le dejaron sus tíos, o esto es lo que le dijeron ellos.

Pero le resultó extraño que sus familiares dejarán de visitarlo repentinamente, en qué momento lo trasladaron a este lujoso hospital de último nivel.

Viendo todo esto, parecía un ensueño, pensándolo bien, esto parece más un sueño y de hecho esta es la conclusión a la que llegó Johan, recuperó su vista y estaba en un hospital que parecía más un palacio, entonces su semblante decayó y su expresión se apagó, quizá la misma Ana era solo un hermoso sueño.

Elías lo vio abatido y se sintió molesto, así que le indicó a una de las enfermeras que lo enviaran de vuelta a su habitación.

Mientras Johan era llevado en su silla de ruedas devuelta a su habitación, escuchó una voz familiar en medio del pasillo.

Viendo en dirección de la que venía la voz, Johan la reconoció de inmediato, venía de la habitación que habían pasado recientemente, y la emoción hizo que saltara sin pensar, cayéndose de la silla de ruedas.