CAPITULO 45
Julián se recuperaba lentamente, después de estar sometido a días de maltratos por parte de los lobos de Anthony.
Soportaba todo con la esperanza de volver a ver a su amada Cassandra y de conocer a su hijo Leandro.
No hablaba mucho, y es que los traumas ocasionados por Anthony fueron determinantes para el.
Alexandra le agradecía a Ezequiel, el no tenía nada que ver en esto, ni siquiera conocía a los implicados y mucho menos pertenecía a una de las manadas, el solo lo hacía por ayudar.
— Desde que Cassandra y tú llegaron a mi vida, le dieron un nuevo sentido, era un aburrido médico, pero ahora me siento un héroe — sonríe el lobo mientras le da un abrazo a Alexandra.
Ezequiel no deseaba estar con ellas como lobas compañeras, lo que existía en el era un cariño protector de hermano o de padre lobo.
Alexandra se enteró de la declaración de guerra, se sintió culpable, sabía que era por las provocaciones que ella había ocasión, y tenía miedo por su gente.
Moonligth pelearia hasta