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En la mansión de la familia Hill.

Catherine llevaba puesto un delantal, estaba cocinando unas costillas de cerdo en la cocina.

Ya que Shaun no había ido a trabajar hoy, acompañó a los niños a completar algunos rompecabezas en la sala de estar.

“Esto está mal. Se supone que el ala debe ir aquí…”.

“Lo pusiste en el lugar equivocado, tonta”.

“Papá, Lucas me está molestando de nuevo. Incluso me llamó tonta”. Suzie hizo un puchero y se quejó con él. “Él es simplemente estúpido. Esta pieza debería ir aquí”.

A Shaun le dolía la cabeza por las quejas de su hija. Suzie lo había puesto mal, pero estaba comenzando a llorar. Una vez que llorara, se consideraría que tenía razón en todo el mundo. “Esta bien, esta bien. Estás bien. No eres una tonta. Dejémoslo allí”.

“Mira. Incluso papá dijo que yo tengo razón”. Suzie instantáneamente dejó de llorar y empezó a presumir al respecto.

Lucas se quedó sin palabras. “Esto es aburrido. No quiero jugar con ustedes, o mi coeficiente intelectual b