CAPÍTULO 52. SUCUMBIR A LOS DESEOS
Miguel
Llegó a la casa de Gabi hoy no debí de venir aquí, debí haberme ido a mi apartamento porque esto no está nada bien, no se porque no puedo dejar de pensar en lo que sentí cuando esa niñita me follo y no entiendo porque pienso en eso si no está bien, no he podido ver a Gaby y eso es otra cosa que me desespera y donde ella se dé cuenta de lo que sucedió con su hermana jamás me lo perdonará de seguro me mata y lo peor es que mi entrepierna esta super excitada por lo que sucedió con esa niñita pero no puedo dejarme llevar yo no soy Brat.
Entró en el cuarto y cierro rápido le colocó pestillo, por si de pronto a ella le da por entrar, aunque sería inútil si ella tiene llaves de todas las habitaciones, aunque no estoy muy seguro de haber cerrado con pestillo es que llegue tan cansado que de seguro olvide colocarlo, me meto en la ducha para bajar la calentura que tengo, me quito la ropa y me tomo un baño cuando termino y me coloco ropa cómoda me hecho desodorante y loción para oler bi