Novalee y Wayne comenzaron a bailar al ritmo de los golpes folclóricos que daba la banda. Eran piezas de música muy vigorizante y Novalee comenzó a recordar su mejor época de baile. En un momento, todos comenzaron a bailar con los mismos pasos, lo cual hizo que todos rieran entusiasmados.
—¿Quieres probar el vino de manzana que prepara Sean? — Pregunto Wayne cuando pararon de danzar —
—¡Claro que sí! — Dijo Novalee —
—¡Espera aquí! — Dijo Wayne —
Cuando Wayne se marchó a buscar las bebidas, Novalee recordó a su hijo Arthur y comenzó a mirar para todos lados, buscándolo. Pronto observó que iba montado en una especie de camión de juguete y una niña con sombrero iba sentada a su lado. Dos chicos de aproximadamente la misma edad iban jalando el vehículo con fuerza para darles una vuelta por toda la pista de baile.
Novalee iba a comenzar a caminar hacia Arthur cuando apareció Wayne con las bebidas.
—¡Oh no¡ ¡Déjalo en paz! ¡Se está divirtiendo! — Dijo Wayne —
En ese momento se acercaron lo