Mike no sabía dónde estaba Avery, pero su teléfono estaba sobre su mesa.

Tomó el teléfono y abrió rápidamente la lista de números de teléfono bloqueados.

¿Eh?

¡El nombre de Elliot no estaba en la lista en absoluto!

Mike volvió a dejar el teléfono en el escritorio y fingió que no había pasado nada.

En ese momento, se abrieron las puertas de la oficina y entró Avery.

"¿Ha respondido el Grupo Sterling?", preguntó ella mientras se acercaba, recogía el vaso que había sobre el escritorio y tomaba un sorbo de agua.

"No quieren devolver la mercancía", informó Mike. "No vas a insistir en que devuelvan los productos, ¿verdad?".

Avery dejó el vaso de agua, luego levantó la mirada hacia Mike y dijo: "Realmente me entiendes. Sin embargo, aunque insista, no devolverán la mercancía. No tiene sentido enredarse con ellos".

Mike le dedicó un pulgar arriba a Avery.

"¡Envíales más de siete millones y medio de dólares!", añadió Avery.

Mike se quedó sin palabras.

"Olvídalo", dijo Avery mientras