Continué colocando las benditas luces de navidad por la mañana y ya terminé. Tengo una tarde libre de decoraciones. Las últimas luces que faltaban eran las de mi piso.

-Jane debes ir al centro comercial a comprar un nuevo árbol de navidad... tuvimos un accidente con el nuestro.

Me pidió Marie apenada.

-¿Qué ocurrió?

-Grandog... lo partió.

Negué con mi cabeza.

-Iré. ¿Tiene que ser uno igual al que teníamos?

-No. Busca uno que sea parecido y ya. Gracias, Jane.

Ella me abrazó muy feliz.

-Igual hoy iba  a salir a comprarle a Naty su regalo.

-Ah mira. Que suerte hay hoy.

Sonrió y bajo las escaleras. Suspiré.

-¿Saldrás entonces? ¿Puedo contigo?

-Si, cola de pez. si te cambias la ropa rápido.

Le sonreí y camine a mi cuarto para cambiarme. Me vestí y agarre mi bolso coloqué mi billetera y salí del cuarto.

-Ya estoy listo.

-Yo también, vamos cola de pez.