35. ¿Y por qué tú vas tanto a ver a mi Dada?
Jareth no dudo en abrazar a Claire tras escuchar que aceptaba pasar ella y los niños ir a casa de su padre a cenar pizzas, ganándose una que otra exclamación de asombro y de enojo por parte de sus hijos, quienes llegaron a abrazar a su madre colocando en medio de ellos.
Eso solo lo hizo enternecer y aspirar de manera profunda, orgulloso de ver cómo sus hijos protegían a su madre. Lo hizo que se las ingeniara para cargar a ambos.
—Lo sé, lo sé, ustedes deben decidir si yo estoy con mami— dijo dándole a cada uno un beso en las mejillas.
—Por cierto, no sé si lo sepan, pero iremos a casa de su Dada a cenar pizzas y papás fritas con él.
— ¿Y por qué tú vas tanto a ver a mi Dada?— Henry, quién era más celoso de su madre que Danielle, entrecerró los ojos limpiándose la mejilla que Jareth le había besado con la mano. — ¿También quieres quitarme a mí, Dada?
Estaba visiblemente molesto de camino al coche, mientras Danielle que era más diplomática, le hacía las preguntas que le interesaban sobr