La luna de miel en París fueron días inolvidables que retrataron la feliz pareja en la torre Eiffel, almorzaron y tomaron café con un hermoso paseo en barco por el río de Sena, en un atardecer colorido de amarillos y naranjas con el sol ocultándose por el oeste.
Christian y Jessica se encuentran de pie en el babor del barco viéndose frente al otro, cuando Christian le declara.
-Me enamoré de ti desde que te robé aquel beso en el ascensor.
A partir de ese momento lo supe. Te amo Jessica, te amo tal como eres, así de imperfecta y maravillosa. Tu eres más que hermosa para mí, y lo fuiste desde que miré toda la pureza de tu corazón y es de esta de la que me enamoré como un loco.
Tú eres mi motivo para seguir. Antes de ti, yo solo me limitaba a ver pasar un día tras otro, me