¡Si alguien se interponía en su camino, lo sacaría del camino!

Él quería ver a Xia Xi. ¡Quería ver a Xia Xi sin importar qué!

Levantó la mano y lanzó un golpe con fuerza hacia el hombre que tenía delante. La entrada al cementerio comenzó a volverse caótica.

En el cementerio, Xia Xi estaba parada frente a la tumba de Gong Nanting. Los trabajadores sacaron la vieja lápida y la reemplazaron por una nueva. Había una nueva línea con las palabras ‘Esposa, Xia Xi’ junto a las palabras ‘Esposo, Gong Nanting’ en la lápida.

La única diferencia era que las palabras ‘Gong Nanting’ fueron dibujadas con tinta roja, lo que representaba que había muerto. Mientras tanto, las palabras 'Xia Xi' estaban en oro, lo que representaba que todavía estaba viva.

Cuando Xia Xi muriera y sus cenizas fueran puestas en esta tumba, las palabras doradas serían pintadas de rojo.

Xia Xi miró en silencio la nueva lápida y murmuró: "Nanting, iré a buscarte algún día. Pero podría ser vieja para ese entonces. Será mej