Zhuo Qianyun guardó silencio e ignoró al Señor Yu. No quería entretener a la multitud en la sala, pero el Señor Yu pensó que Zhuo Qianyun había admitido tácitamente lo que dijo.

Los ojos de Yan Qiongying brillaron cuando escuchó al Señor Yu decir ‘una mujer que ha estado en prisión’.

Sabía que además de tener que concebir un hijo, el hecho de haber estado en prisión era un gran problema si una rompehogares como ella quería un título oficial.

Afortunadamente, la esposa de Wu Huairen solo había dado a luz a una hija. Si ella pudiera concebir un hijo y ayudar a Wu Huairen a conocer a Ye Wenming, ¡la posibilidad de que obtuviera un título sería mayor!

Al pensar en esto, fingió parecer que estaba haciendo esto por el bien de Zhuo Qianyun y susurró: "Qianyun, lo siento. Solo quería invitarte a comer. No esperaba que las cosas salieran así. Pero los amigos de Huairen son todos ricos. Debido a nuestra situación, cuanto más podamos obtener, mejor. ¡Ayudará a asegurar nuestro futuro!”.

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