Sin embargo, durante todo el trayecto, su mano estuvo agarrando la mano de Ling Yiran, y su agarre se tornó cada vez más fuerte. Fue cuando ella gritó de dolor que él inmediatamente volvió a sus sentidos y rápidamente la soltó. "¿Te dolió?".

"No te preocupes. ¿Qué tenías en mente?", preguntó ella.

Su mirada cayó sobre el rostro de ella. ¿Qué debería decirle? Él se había estado preguntando qué pensaría ella de él si su abuelo le dijera la verdad sobre el accidente. ¿Seguiría diciendo que nunca lo dejaría con la misma firmeza que antes?

Levantó la mano y sus dedos fríos tocaron la mejilla de ella. Luego la acercó a él con sus brazos.

"Dijiste que siempre te quedarías conmigo, y si no puedes hacer eso, entonces… probablemente elegiré morir contigo", murmuró. Había una pizca de inquietud en su voz ronca.

Ling Yiran solo podía oler el aroma de Yi Jinli en su nariz. Lo que podía oír no solo era su voz, sino también los latidos de su corazón.

¡Era inusualmente fuerte!

Ella no esperaba