La ducha del baño estaba al máximo y la puerta del baño estaba cerrada. Por lo tanto, a pesar de que el timbre sonó durante mucho tiempo, Zachary y Charlotte, que estaban en el baño, no pudieron escuchar nada.Sin embargo, Ivan, que estaba fuera de la Casa #601, persistió. Él siguió tocando el timbre continuamente, una y otra vez.El hombre a su lado trató de aconsejarlo. “Señor, ha pasado mucho tiempo y nadie ha llegado para abrir la puerta. Parece que no hay nadie dentro. ¿Tal vez deberíamos irnos?”.Al menos 30 hombres altos y corpulentos estaban parados detrás del hombre. Estaban apiñados en el pasillo junto a la puerta como sardinas enlatadas.Ivan, furioso, tocó con la mano el timbre.“¿Irnos? Cuanto más me ignoran, más probable es que sean culpables. Deben estar haciendo algo escandaloso allí dentro y están tan absortos en ello que ni siquiera pueden oír el timbre de la puerta… ¡Abre la puerta de una patada! ¡Quiero ver qué están haciendo!”.“¡Está bien, Señor!”.El hombr

“¡¿Qué?!”.Ivan apartó los ojos de Charlotte y miró a Zachary.“¡Bah! No tienes que ponerte de su lado. Vi el vídeo de ella confesando su amor por ti en el restaurante y escuché que fue directamente a ti después de regresar a Rothesay. Al principio no le hiciste caso, pero luego… ¿por qué? ¿Por qué de repente cambiaste de opinión?”.Ivan sacudió su cabeza.“Zachary, sé que eres un hombre de principios y, según lo que sé de ti, estaría bien que no accedieras a casarte con Lory. Sin embargo, dado que te has casado con ella, definitivamente no cruzarías esta línea y tendrías aventuras como otros hombres irresponsables. ¡Estoy tan confundido! ¡No puedo entender lo que está pasando entre Tiria y tú sin importar cuánto lo piense!”.Una pizca de sorpresa cruzó los ojos helados de Zachary. Sin embargo, no podía explicárselo a Ivan porque tenía que proteger a Charlotte. Por lo tanto, simplemente respondió sin expresión: “Si no se te ocurre nada, permíteme que te ilumine. Es el poder del am

El rostro de Charlotte se puso rojo cuando miró a Garrison con sus ojos claros llenos de culpa.“Lo siento, Garrison. No esperaba que las cosas resultaran así…”.“Recuerdo haberte dicho antes que nunca tienes que disculparte conmigo”. Garrison la interrumpió, sus hermosos ojos estaban llenos de tristeza y dulzura.“Además, conozco tu verdadera identidad, por lo que, fundamentalmente, no eres mi esposa y no tienes que disculparte conmigo”.La comisura de los labios de Charlotte se torcieron.¡Garrison!Él siempre había sido tan amable con ella, por lo que no podía odiarlo a pesar de que le había estado mintiendo estos 4 años.“Está bien”.Cuando él vio que Charlotte estaba a punto de decir algo, le guiñó un ojo y agregó: “Será mejor que dejes de hablar dada tu condición actual. Date prisa y vístete”.“Bien…”.Charlotte bajó un poco la cabeza y caminó hacia la puerta.Lo que no notó fue que el rostro de Zachary se había vuelto tan oscuro como el fondo de una olla.Aunque no p

“No, no puedo…”.La adorable niña, que era tan fría como el hielo, pero tan bella como una estatua de mármol, sacudió su cabeza vigorosamente.“Mi papi y mi mami me dijeron que no puedo simplemente llamar a cualquiera ‘papi’. Solo tengo un papi, Señor Malo. Puedes sobornarme con chocolate todo lo que quieras, pero no te puedo llamar papi”.Una pizca de decepción brilló en los ojos entintados de Zachary.Luego, escuchó a Naomi reírse y decir: “¿Sabías esto, Señor Malo? Me encantan los chocolates de ‘Ositos’. Esa tienda de chocolates no está muy lejos de mi casa. Si compras uno de mis chocolates favoritos en esa tienda, te daré un abrazo o un beso”.Zachary, que rara vez mostraba alguna emoción, en realidad mostró un toque de alegría en su rostro perfecto, como el de un glaciar.“Si me abrazas y me besas ahora mismo, te compraré toda la tienda de chocolates”.Naomi se apartó de los brazos de Charlotte tan pronto como escuchó esto y corrió hacia Zachary con sus piernitas.Zachary

Jebediah estaba sentado en el asiento del conductor. Los deslumbrantes rayos del sol brillaban en su rostro incomparablemente hermoso.¡Clac!La puerta se abrió de repente. Entonces, la voz resentida de Lorraine lo azotó. “Lo sabías, ¿no es así?”.Jebediah miró fijamente su rostro demacrado, luego su vientre que todavía se veía plano.“Sí”.“Je…”.Lorraine se rio. Las puntas de sus dedos temblaban más violentamente que nunca.“A veces, solo para hacerte feliz, te diría que no usaras condón. Ahora me he ganado el premio gordo. Ahora que lo sabes, deberías sentir aún más pena por mí, deberías agradecerme y deberías esforzarte aún más para ayudarme en mi campaña contra Charlotte. Pero, ¿qué hiciste en su lugar? Ayudaste a mi enemiga a mis espaldas. ¡Justo cuando la victoria parecía estar al alcance de mi mano, llamaste a mi hermano de vuelta a Rothesay y la salvaste!”.El dolor en su rostro hizo que las profundas y heladas pupilas de Jebediah se desbordaran de simpatía. “Estoy hac