Estaba a un lado de el, no entendía el porque estábamos aquí y mucho menos que era ese lugar, una casa vieja. La naturaleza había tomado aquella viviendo como parte de ella, parecía que la había reclamado ocultandola de la sociedad. Él se acercó a la vieja puerta y empujó de ella con fuerza logrando abrirla, lo mire sorprendido y a la vez con algo de miedo, Yungpio-gun me miro y sonrió para después entrar, me quedé ahí parado sin saber que hacer o decir. Me acerque lentamente a la puerta solo para ver un cuarto lleno de polvo y telarañas, mi mejor amigo estaba en una esquina revisando una caja así que me acerqué más para ver qué era lo que estaba haciendo.—si.... Sabía que aquí estaba! —me dijo a lo que se levantó y se giro hacia mi para darme lo—¿Que es esto? —dije con curiosidad mientras lo miraba detalladamente y con cuidado de no tirarlo—es un reloj! —dijo lleno de orgullo y con una sonrisa—¿Un reloj? —pregunte a lo que el asintió—te dirá la hora con la sombra del palo al pon

Estaba derramando el aceité en una de las cajas, mientras aventaba papeles por toda la habitación, una fuerte luz anaranjada iluminó el cuarto donde estaba por lo que me dirigí a la ventana, a unos metros de distancia estaba una de las torres a la que había ido mi hermano, está estaba en vuelta en llamas por lo que sonreí, prendí el fuego y este comenzó arder con rapidez. Salí rápidamente de la habitación para ir por las escaleras, pero me detuve al ver qué los guardias estaban subiendo por ellas, mire a mi alrededor el pasillo ya estaba en llamas y ellos estaban subiendo. No podía quedarme a pensarlo tan detenidamente como en otras ocasiones, así que di un brinco y me agarre de uno de los peldaños de madera, estire uno de mis pies logrando que tocará el otro pedazo de madera del techo. Me gire lentamente para ver qué los guardias ya estaban en el lugar donde estaba un momento antes, estaban pidiendo baldes de agua para apagar el fuego. Mientras que otros subían con baldes al último p

Se acercaba cada vez más a la entrada, pero al no ver nada entro por completo para después darse cuenta de que Hyun se encontraba débil en la cama, se acercó lentamente al mismo tiempo que sacaba su sable y se preparaba para matarlo de un sólo golpe, yo estába en la viga de arriba esperando el momento indicado. Me agarré con fuerza de está mientras bajaba y quedaba colgado atrás de él, sólo para después colocar de un movimiento rápido mis piernas alrededor de su cuello, viendo como soltaba su espada e intentaba safarse de mi agarre, sin embargo yo apreté con más fuerza mientras intentaba subir provocando que el comenzará a patalear en el aire. No tarde mucho para girar una de mis piernas con fuerza rompiéndole el cuello y dejando que cayera en el suelo, subí nuevamente y mire a Sun-hee que estaba a mi lado viendo todo lo que había pasado para después verme. —Debo ir por Shane —dije en un susurró, ella bajo su mirada y vio a Hyun—Estamos cayendo en hoyo sin fin, y lo peor es que tú h