Aleksandr está emocionado y tengo que admitir que le he cogido cariño al niño, aunque sigo preguntándome de donde salieron las agallas para entrar a robar, no habla mucho, lo que está bien para mí, sus ojos curiosos miran mi cicatriz siempre que le veo.
—¿Señor Scott? — pregunta cuando estamos entrando al vecindario
—¿Sí? — pregunto mirándolo por el retrovisor, Nikolay está tranquilamente jugando con un peluche que Talia le había dado, y murmurando algo sobre superpoderes.
— ¿Que le pasó en su cara? — dudo antes de responder, el niño, al igual que la mayoría parecía asustado de verme, pero siempre intentaba mostrarle "mi lado bueno"
— Un hombre malo me hizo daño — explico, el niño asiente, la explicación pareciendo razonable
— El hombre malo tamb