Luego de que le inyectaran un medicamento antipirético y de tomar otros medicamentos, además de haber dormido durante todo un día, Sharon finalmente se recuperó de su enfermedad.

Después de lidiar con algunos documentos, Simon fue a visitarla, pero entonces descubrió que la mujer estaba enojada.

"¿Por qué no llamaste a alguien si ya estás despierta? ¿Quién te hizo enojar?”. Él se sentó al lado de la cama.

Ella estaba disgustada por las palabras dichas por Howard antes, por lo que lo echó. La ira dentro de ella no disminuiría tan pronto.

Si Howard no hubiera huido del lugar lo suficientemente rápido, Simon lo habría visto.

"Yo...". Ella tosió en el momento en que habló. En ese momento, recordó que su garganta estaba seca y dolorida.

Simon le sirvió un vaso de agua. "Bebe un poco de agua antes de hablar".

Ella tragó rápidamente el gran vaso de agua y sintió que su garganta mejoró mucho.

Simon encontró divertida la forma en que bebía el agua. “Bebe despacio. Nadie te va a arrebata