-Marco-
Los últimos días han sido algo estresantes para mí, nunca antes había compartido tanta intimidad con una persona, con las mujeres que he estado sola íbamos a hoteles, teníamos sexo y todo terminaba en ese momento, no quería que se pudieran confundir y que piensen que teniendo sexo una vez con ella, podría repetirse ese encuentro o intentaran volver a salir conmigo, no sé por qué la ayudo tanto, he tratado de protegerla de todo, estoy en la oficina resolviendo algunos asuntos con respecto a la nueva empresa que tendremos en esta misma ciudad, y mi familia es dueña de casi todo Ciudad Norte, una empresa más o menos, no le da mucha importancia a nosotros y menos a mi padre, él solo quiere dar a conocer el nombre de la familia más importante, la familia Pérez. En mi oficina recibí una llamada de mi amigo Alonso.
-Sí.
-Marcos, ¿dónde estás?
-En la oficina.
-Vale, podemos vernos un rato, mira, tenemos días sin vernos como grandes amigos que somos.
-¿Dónde?. Soy directo, necesito sal