La Vida De Azul Dimitri
La Vida De Azul Dimitri
Por: Viviane
1 como todo empieza

Me llamo Azul Dimitri, les quiero contar cómo el amor toco mí puerta y cambió mí vida de m****a

Se que muchas personas no recuerdan cosas de su infancia pero yo recuerdo con exactitud cada día de mi niñez,cada mañana me despierto con algún recuerdo,sueño y pesadillas de aquellos tiempos del pasado.Tengo recuerdos de vivir en una casa que para mí era enorme y hermosa. Una madrugada,me desperté mojada y llorando,pensé que me había orinado encima pero no fue así, sucedió que llovía mucho afuera y la casa era precaria,tenía goteras por todas partes,y muchas justo sobre mi cuna,lo que hizo que se mojara mi ropa, cuerpo,mantas y colchón.

Mi mamá se acercó a mí, cambió mí ropa y me recostó en un colchón viejo en el suelo junto a los pies donde dormía mi padre, él  roncaba y su aliento era muy fuerte. Con los años supe que era por el alcohol que bebia.¡ Sí !mí padre era alcohólico no recuerdo a qué se dedicaba o si siquiera trabajaba su nombre era Miguel,un hombre robusto,su piel era arrugada sus ojos expresaban rabia todo el tiempo,en cambio mí mamá si trabajaba mucho,su nombre era María;una mujer muy bonita,delgada de estatura pequeña,sus cabellos estaban siempre recojido en un rodete bien alto,su piel era muy clara como la mía y nuestros ojos tenían el mismo color.

Esta mañana mi madre ya no se acostó más y yo no pude dormir ,sentía frío y eso no permitía que reconciliara el sueño.Veo que mí madre se puso a correr algunos muebles y empezó a llenar la casa de ollas,baldes y trapos en cada gotera que encontraba. Ya sin tener que poner se resigno y puso a calentarse agua en una jarrita,para prepararse un té. Sentí que mí madre lloraba muy bajito,por la forma en que respiraba.

La verdad es que no tenía idea de que hacer era muy pequeña y me apenaba ver a mí mamá así. Me levanté en puntitas de pie y me empecé a vestir. Ya que dentro de poco mamá saldría a trabajar y me llevaría a lo de una señora que me cuidaba a cambio de "cigarrillos"; almenos eso era lo que yo veía que mí mamá le daba a cambio de cuidarme cada noche.

Mí mamá me llevaba cuando apenas salía el sol,y regresaba por mi en casa de esa señora muy tarde en la noche.

Una noche ya  muy tarde sentía hambre y esperaba ansiosa a que viniera mamá a buscarme.De pronto tocaron la puerta y de un salto baje de mí silla y fui a su dirección,la recibí con un gran abrazo y una enorme sonrisa. Eran cerca de la medianoche según me había dicho la señora que me cuidaba,no se que horario era ese, pero, era tarde por mí sueño y hambre.A mí madre se la veía muy cansada y su cara estaba apagada,traía unas bolsas muy cargadas con frutas y galletas de agua saladas,nos despedimos y salimos,como pude me agarre de una punta de su pollera ya que llevaba ambas manos ocupadas por las bolsas pesadas.

Caminamos en silencio varias cuadras,ya que en esas calles no había luz más que tres u cuatro casas que apenas alumbraban el camino;eran apenas cinco calles hasta mí casa pero esta noche fueron las calles más largas de mí vida.

Al acercarnos a nuestra casa veo que están los pocos muebles que tenemos afuera,mi cuna está cerca de la entrada que da hacia la calle. Mi madre empieza a caminar rápido arrastrándome, tira las bolsas al piso y me pide que no me aleje de ellas por nada  del mundo entero,yo solo asiento con la cabeza. Mi madre sale corriendo y llorando hacia esas personas.La veo que llora de una manera desgarradora y se cae de rodillas,cosa que hace que yo empiece a llorar también.las personas que estaban allí se le acercan tranquilizandola y mostrándole unos papeles. Al rato aparece una señora de adentro con dos bolsos nuestro,se lo entregan a mi mamá que aún llora pero más calmada y se acercan a mí.

Mi madre me toma en brazos y un señor junta las bolsas que ella había tirado al suelo  haciendo seña para que lo siguiéramos,nos acercamos a un coche rojo,en donde mí mamá me sentó en la aparte de atrás y ella y el hombre fueron sentados adelnate

En silencio el hombre maneja,mi madre llora sin ruido, yo siento mucho miedo,angustia y sobretodo mucha hambre. 

El hombre estaciona el auto en una esquina,mi mamá baja rápido en dirección a un teléfono público. La veo por la ventanilla que se toca la cara,mueve sus manos,sabía que estaba llorando.

Yo miro hacia adelante y el hombre se voltea de pronto a mirarme. Lo único que le digo es que siento hambre,ese se gira nuevamente adelante y en un par de segundo me alcanza sin mirar atrás dos galletas saladas pequeñas. No emito sonido alguno solo las agarró y sin pensarlo en lo que mi madre siempre me dice(no aceptar nada de un extraño),mi hambre era terrible y pensé que si moría por envenenamiento al menos sería con algo en mi estómago, la devoró en dos segundos y la otra galleta la escondo en mi bolsillo para dársela a mí mamá más tarde

No me saco el hambre al decir la verdad pero me sentía saciada. Mi madre vuelve a subir al auto,me mira y sonríe anunciando que ya todo estaba bien. El auto se pone en marcha por un largo rato.

No se en que momento me dormí,solo que me desperté al día siguiente en una casa que no conocía,había una mujer sentada en una mesa tomando algo en una taza y fumando un cigarro. Me levanto de golpe asustada,buscando a mi mamá,esta no estaba en mí campo de visión.

Me asomo muy lento a la mujer que alza la vista y sonríe muy alegre al verme.:

-Buenos días cariño. _ me dice esta a continuación._ Me llamo Gisella,soy muy amiga de tú mamá,van a estar un tiempo viviendo conmigo,lo que me alegra muchísimo, siéntate que te serviré de comer.!

Yo asentí con mi cabeza conforme,y cuando escuché comer,salte a una silla . Me trajo un gran vaso de leche con chocolate y muchas rodajas de pan. Al ver eso empecé a llorar y está preocupada se acerca a mi muy rápido:

-¿Que sucede cariño?¿No te gusta lo que te traje para desayunar?

Me seco la cara con mis manitos y asiento con un si:-

-Muchas gracias .

Fueron mis únicas palabras. Esta acaricia mi cabeza con una sonrisa y se sienta frente a mí.

No sé cuánto tiempo pasó sin ver a mi mamá ese día ,solo se que disfrutaba estar en esa casa,era pequeña pero era cómoda. Se hizo de noche y Gisella nos sirve la cena que olía muy bien,se siente junto a mí cenamos en silencio,ella había cocinado pastas con pesto y les confieso que desde esa noche empezó a ser mí platillo preferido.

Cuando terminamos de cenar Gisella me lleva al baño,me lava manos y cara,me cambia la ropa y me recuesta en una cama grande, prende el televisor en dibujos animados,me tapa hasta el cuello y acomoda mí almohada, deposita un beso el mí frente,se sienta aún lado de la cama y acaricia mí pelo,en unos minutos me quedé dormida

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