CAPITULO 49

Toda la sala en especial Regina se quedó completamente helada, la pobreza entidad dentro de su corazón que todo lo que estaba sucediendo no podía llegar a ser verdad.

Se había convertido en un viacrucis de sentimientos en especial porque en el fondo de su corazón lo único que necesitaba para poder encontrar la libertad de estar con el hombre que amaba era que en este juicio lo condenaran como inocente o por lo menos que le dieran una pena que pudiera pagar sin afectar su vida.

—¡Señor juez! Es una pena demasiado alta para una madre soltera que incurrió en su primer delito y que demostró que lo hizo por causas mayores — en ese momento todo estaba muy difícil de creer.

Para Manuel todo esto se me ha convertido en una verdadera y justicia era imposible que con todos los menesteres y sobre todo con el testimonio de Nubia se declarara esta pena.

— Concordamos con la defensa Señor juez, también consideramos que la pena para el delito actual que esto está juzgando es demasiado al