Reina regresó al apartamento muy nerviosa, colocó sobre el mesón de la cocina lo poco que alcanzó a comprar en el súper, ya que cuando vio los avisos donde estaban buscando a Ana Beatriz, salió a toda prisa del centro comercial antes de que alguien más pudiera verla, estaba atacada de los nervios.

Rubén se encontraba tomando una copa de licor junto a Abril, mientras la niñera permanecía encerrada en la habitación junto a la pequeña; ambos se quedaron atónitos cuando vieron llegar a Reina con ese nerviosismo y con el rostro pálido casi a punto de desmayarse.

— ¿Qué te pasa cariño? Cualquiera diría que has visto un fantasma. —le dijo Rubén mientras tomaba un trago de licor con una expresión de tranquilidad como si nada estuviera pasando.

— Mientras tú te encuentras de lo más tranquilo bebiendo el poco licor que te queda, hay carteles con la foto de la niña por toda la ciudad donde se puede leer claramente que ha sido secuestrada. ¿Te das cuenta lo que eso significa? La policía est