Shaun la miró fijamente. “¿Qué quieres hacer, Hannah? Sólo dilo”.

“Shaun, quiero presentarte formalmente a mis padres ese día, pero eres hábil y mi papá está ayudando a Wesley. Tengo miedo que hagas algo contra mi papá el día de la fiesta de cumpleaños. No te preocupes, mientras seas obediente, mi familia definitivamente no le hará daño ni a ti ni a los niños”, dijo Hannah con una sonrisa.

Shaun bajó la cabeza y sonrió. “¿Qué pasa si me niego?”.

“Entonces no puedo dejar que vayas a la fiesta de cumpleaños de mi papá. Lo siento”. Hannah lo trató de seducir diciendo: “Pero Shaun, eres un hombre inteligente. Deberías saber que mi padre se convertirá en primer ministro tarde o temprano. Si te casas conmigo será de mucha ayuda para tí. Para ser honesta, no me gusta Wesley. Creo que eres mucho mejor que él”.

Shaun se rio entre dientes y le pellizcó la barbilla. “Ya que lo dijiste, ¿qué más puedo decir?”.

...

A las 10:00 p.m., después de que Shaun regresara a la mansión Hill, Hadley se