Liam
La abracé con fuerza a mi cuerpo, ella simplemente se derrumbó entre ms brazos, convulsionó debido al llanto, sentí un nudo en mi garganta, el pensar que podría perder a cualquiera de mis padres, solo sentí terror, no podía imaginar a Regina y más cuando es muy apegada a ellos.
—Tranquila, todo estará bien—susurré cerca de su oreja, ella se separó de nuestro abrazo y se limpió las mejillas con rapidez, intentó controlarse.
—Gracias por venir, no era necesario que volaran desde New York…—dijo apenada mirando por un momento en mi dirección y luego hacia mi padre que tenía abrazada a mi madrina. Él suavizó su mirada.
—No digas eso. Si es necesario, ya mis abogados se están poniendo al día con lo que está pasando con la empresa, cuando esté bi