Shelly no había pensado en eso y dijo: "Olvídelo. No quiero molestarlo".

Al ver lo educada que era Shelly, la recepcionista quiso ayudarla desesperadamente. "Por favor, espere, señorita Taylor. Llamaré para ver si el señor Tate está ocupado", dijo la recepcionista y descolgó el teléfono fijo. "La señorita Taylor de la Cafetería Courtney ha traído kimchi para el señor Tate. ¿Me puedes ayudar a preguntarle al señor Tate si ella puede subir a entregarlo?".

Shelly se sintió avergonzada.

Al principio no quería entregarle nada a Hayden. Sin embargo, su madre preparó un poco y como Hayden la había invitado a cenar a ella y a su madre durante el fin de semana, su madre insistió en devolverle el favor.

Shelly no creía que a un hombre de la categoría de Hayden le interesara el kimchi casero, pero su madre insistió en que lo que contaba era la intención y que había que devolverle el favor.

Poco después, la secretaria de Hayden dijo: "El señor Tate le ha pedido a la señorita Taylor que suba".