Capítulo 102. El Beta prisioneroMilenka KellerNora llevó a Milenka a su sótano, donde había muchos estantes con diversas sustancias, y muchos frascos de diferentes colores con muchas palabras escritas, luego sacó unos baúles. Se veían muy pesados, pero con el poder de la magia, Nora los colocó sobre las mesas para sacar muchos libros y libretas donde había ido anotando todo. – ¿Qué es lo que estamos buscando en realidad?Milenka estaba sorprendida por todo lo que Nora estaba sacando y lo miraba pensando en qué podría servirles todo eso. Esperando que fuera a serles de mucha utilidad.–Aunque tú no lo creas Milenka, cuando lo tengamos frente a nuestros ojos lo sabremos, los escritos saben mucho más que nosotras y tenemos que confiar en su sabiduría.–Muy bien, estaré muy atenta a todas esas señales. Estoy segura de que algo nos puede aportar todo esto.Empezaron a revisar cada una de las libretas y cada uno de los libros, estaban en total silencio, que si dejaban caer un alfiler, se

Milenka KellerEntre Milenka y Nora, estudiaron el hechizo a consciencia, que tenían que realizar más que nada a Mildred, ella era la que tenía que soltar a Ramsés, pero desde luego que el procedimiento él estaba involucrado al cien por ciento. Ahora estaban conectados de una manera más interna y desde luego que más delicada. Por eso Milenka se había preocupado en un comienzo, por nada del mundo quería que su esposo saliera dañado. No quería que ocurriera ningún accidente al hacer todo en contra de Mildred, pues también lo estaría haciendo en contra de Ramsés. Ella tendría que soltarlo primero y entonces poder actuar en la cabeza de Mildred.–Nora, estoy preparada para cualquier eventualidad, ahora no puedo hacer nada por Ramsés, solo hasta que esté liberado del dominio de Mildred, y en cuanto eso suceda debo tener la mente muy abierta para lo que se me presente.Milenka tenía fe en que todo ese procedimiento iba a salir de maravilla. Ella sabía que con sus conocimientos, con la ayu

Milenka KellerTodo Silver Claw se estaba preparando. Los miembros de las dos manadas estaban expectantes, la Luna del Alfa Ramsés, tomaría el cargo como la sucesora de Ragnar, para dirigir las negociaciones de la de los siete reinos, algunos de los Alfas estaban invitados e iban llegando al centro donde se iba a llevar a cabo la coronación.–Hija, estás preciosa, eres una digna sucesora de Ragnar, estoy orgullosa de ti. Siempre has sido la indicada para tomar ese lugar, lo harás muy bien. He esperado mucho tiempo para verte ocupar ese lugar que te corresponde.Elvira no podía contener la emoción que sentía, Milenka al fin iba a recibir ese importante nombramiento y sería la cabeza del congreso de los siete reinos. Desgraciadamente, para ella, Ramsés no estaría ahí para verla y eso sabía Elvira que le dolería mucho a Milenka, pero no había más. No se podía postergar más el momento.–Gracias, madre, sin tu apoyo no hubiera llegado donde estoy. Has sido la mejor, te amo. Sin ti, no sé l

Milenka KellerUna persona caminaba de manera apresurada hacia la casa que le habían asignado a Nora, tocó la puerta y esta, de inmediato, se abrió, permitiéndole la entrada.–Nora, espero no estar interrumpiendo tu descanso o retrasando tu hora de dormir. Necesito hablarte, por favor. Es algo muy importante y no hubiera venido de no ser así.–Para nada, todavía tengo demasiadas cosas que hacer. Pero cuéntame ¿Qué te trae por aquí? ¿Cuál es tu inquietud?Nora se mostró ansiosa por saber el motivo de esa visita inesperada, algo debía perturbar su mente y sus sentimientos para haberse atrevido a venir a hablarle, pero de cualquier modo se lo agradecía mucho.–He tenido un presentimiento, algo muy profundo en mi corazón. Pienso que Ramsés se está tratando de comunicar conmigo, pero es algo muy raro. Cómo que está presente y a la vez no. Es como si algo no lo dejara contactar conmigo del todo y es confuso.–No dudes que él esté haciendo todo eso, acuérdate que está luchando constantemente

Milenka KellerEn Silver Claw, las cosas marchaban de la mejor manera, empezaron a llegar los demás discípulos a la manada. Siempre se daba como clase de campamento, iban llegando y eran acomodados en las diferentes familias que los hospedarían, algunos lo llamaban como si fuera un internado. Pero siempre se daba en vacaciones, cuando terminaban la temporada regresaban a sus manadas.Pero no dejaba de ser algo divertido para los chicos, pues estaban haciendo lo que más les gustaba, no venían obligados, todos sabían que todo era para su propio beneficio. Eran los mejores de cada manada y ni siquiera venían a competir, solo daban lo mejor de ellos. –Este año han llegado más de lo habitual, pero eso me gusta, las nuevas generaciones están más despiertas y más abiertas a aprender todo lo que se les fuera inculcando.Ragnar estaba viendo cómo iban llegando los nuevos integrantes, al parecer tendrían un grupo bien nutrido y variado. Le gustaba ver llegar a muchos integrantes a la manada, e