ReginaOdio que mi cuerpo se sienta de esta manera, miro la ancha espalda del hombre que acaba de atormentar mis sentimientos y dejo que mi vientre comience a sentirse extraño. Acaricio mi vientre ligeramente. Me pregunto a qué se refería con hacerse cargo cuando me besaba…¡Me besaba!Mi vientre se remueve ahora de forma diferente, el vómito se mueve hacia mi boca y me inclino hacia adelante para vomitar la deliciosa carne que acababa de comer. Una vez mi vientre ha vomitado todo lo que había en el camino débilmente hasta la casa. Irina corre hasta mí cuando me ve y me sostengo de ella sintiendo mis piernas débiles.El calor que se mueve por mi cuerpo es simplemente abrumador y la forma en que mi mente sigue yendo una y otra vez hasta Nikolay me preocupa más de lo que quiero admitir. No puedo sentirme bien con él, estoy aquí por su culpa, contra mi voluntad, como una pieza más de algún plan que ni siquiera conozco.Mis ganas de llorar llegan ahora, mi barbilla comienza a temblar mien

NikolaySalgo de la cama cuando no puedo seguir conteniendo mis ganas de matar a mi hermano, ella estaba en shock, pude sentir la confusión en su cuerpo mientras lloraba sin algún sentido y eso me hace sentir extraño, demasiado extraño.Camino hacia el exterior de la casa después de ponerme un par de pantalones y una camisa, camino por la acera hasta el bar más cercano. Entro en dicho lugar cubriendo mi rostro con la gorra que tomé antes de salir. Me siento en una de las sillas junto a la barra, pido una copa de vodka antes de marcar el número de Alex en mi teléfono.—¿Qué mierda está pasando?Gruñe mi amigo sobresaltado, le sonrío ligeramente a la mujer que pone el trago frente a mí antes de contestar.—Estoy en el bar Noch’, ven aquí ahora mismo.—¿Estás siendo atacado? — cuestiono — , alguien debe morir o alguna cosa así…—No, solo ven aquí.—No voy a ir, son las cuatro de la mañana — resopla — : no deberías estar en tu casa, déjame en paz, si no estás muriéndote.—¡Ven aquí maldit

NikolayMe quedo un rato más con el chico que aún no tengo muy seguro que voy a hacer y supongo que necesitaré encontrar un tutor o alguien que se haga cargo de él. No puedo permitir que Regina se ocupe de él o que Irina esté también al pendiente, un chico debe tener una figura fija en su vida mientras crece.No quiero pensar en que mi pequeña conejita desaparecerá en algún momento, pero es una posibilidad. Me siento junto al chico en el borde del estanque, despeino su cabeza para llamar su atención.—¿Quieres un juguete? — digo sin saber que más ofrecerle — , ¿Qué tal un coche de bomberos?—Quiero ver a mi mamá — comenta metiendo la mano en el agua — , quiero volver a casa.—No puedes volver a casa — respondo — : no por ahora, así que quizás un coche de bomberos sea mejor.El niño me mira, su boca se hace un puchero y se pone en pie antes de fruncir el ceño en mi dirección.—Mami dijo que me portara bien, pero no quiero un coche de bomberos, solo quiero que venga por mí, usted no me

NikolayCorro dentro con mi pequeña conejita en brazos, maldigo cuando pierde la concrescencia y miro con rabia a la chica que se supone debería estarla cuidando. La dejo sobre el sofá con preocupación mientras grito furioso mis próximas órdenes.— Llama al maldito doctor — exijo — , ahora mismo.—Si vor — ella corre hacia el teléfono — yo voy a…—¡Suéltame idiota, mi padre va a matarte a ti y tu familia!La voz molesta de Nelly llena la habitación. Cierro los ojos tratando de controlarme, pero la mujer aún inconsciente en mi sillón me hace imposible conseguirlo. Camino hasta donde uno de mis hombres mantiene a Nelly sujeta, la tomo del pelo sin importarme un infierno que sea una mujer o que esté lastimándola.No puedo tener compasión con ella cuando acaba de hacerle daño a mi pequeño conejito, infiernos, esta estupidez no solo puse en riesgo mi venganza sino también la seguridad de ese bebé y la pobre chica que lo lleva dentro.—Nik, suéltame, me estás haciendo daño.Lloriquea Nelly

NikolayComo era de esperar los problemas no tardan en llegar, maldigo una y otra vez mientras conduzco por las calles del distrito rojo para llegar a la sala de juntas general donde probablemente me esperen más problemas.Regina no respondió una sola de mis palabras, ayer después de lo que sucedió entre los dos. Puedo ver lo asustada que está de sus propios sentimientos y aunque me alegra saber que no le soy desagradable odio entender que eso significará un problema, usarla contra Ramsey ya era demasiado malévolo, pero hacerlo sabiendo que siente algo por mí, que podría desarrollar algún sentimiento es simplemente insoportable para la poca conciencia que me queda.Pensé que jamás vería a la mujer que sin siquiera saberlo se robó una parte buena de mí, una parte que permaneció enterrada junto a esa dulce sonrisa antes de que la vida cambiara rápidamente. Después de ese viaje a Estados Unidos, mi tío cambió, se volvió mucho más poderoso y me dejó mis trabajos más importantes. Si tuvier