Pa... páEl pequeño Domi, balbuceaba mientras jugaba con sus regordetas manos, ahí estaban cinco varones abandonados, se sirvieron un trago mientras Lucien localizaba a las esposas fugitivas Domi de pronto se puso llorón por qué tenía sueño, Doménico sacó su biberón de la pañalera y se lo dió, el niño se fue quedando dormido en los brazos de su padreJusto cuándo el asistente de Lucien le envió la ubicación de Milán, en el celular de los hermanos Black llegaba una notificación, era Luciana, ella había grabado un vídeo donde estaban al menos tres o cuatro strippers masculinos, bailandoles a Angelina, Rocío y a Diane, a Milán la habían tomado de rehén para que pusiera su mano en uno de los apuestos chicos Lucien lo estaba viendo, la mano de su esposa encima del estriper era demasiado para soportar, sus verdes ojos estaban entrecerrados y despedían celos y furia — ¿Qué están viendo? quiero verlo yo también — pidió Lucien Black— Espera papá, mejor no lo veas — Angelo quiso evitar que

Doménico se quedó en la habitación de hotel con Diane, el enfurecido magnate acostó al bebé Domi en la habitación del fondo, una vez que ya pudo estar libre fue a la sala de estar, Diane ya no estaba ahíEl ingles escucho caer agua, su esposa se estaba bañando, la mujer ya había tenido suficiente y quería irse a la cama, su día había sido largo y agotador, pero no contaba con que Doménico la estaría esperando justo al salir— Te has portado bastante mal hoy, me dejaste plantado en el salón con nuestro hijo, Domi me estuvo preguntando por ti todo el tiempo— Domi todavía no habla, estás exagerando, Doménico, además te dejé para que disfrutarás agusto del baile con la rubia esa que te tenía tan entretenido— Yo solo estaba ahí, no era conmigo con quién esa mujer tenía interés, claramente al que quería seducir era a Angelo Black, sabes bien que yo no soy ese tipo de hombre al que le gusta filtrear con las mujeres, yo soy leal a mi relación— Hmm... pues eso no es lo que ví esta noche, ya

Mientras que el apuesto CEO Julien, se apuraba a sacar su trabajo del día para llegar a casa a ver a sus gemelos después del mes de licencia que se tomó, la nueva encargada de compras, Dayse peña, que su asistente Antonio había contratado, apenas lo vió y lo deseó para ella, la mujer era muy joven, tenía apenas veintitrés años, era hermosa, de ojos negros, cabello sedoso y largo, toda una muñequita, pero con el corazón negro e intensiones turbiasDayse, no dejaba de aparecerse ante la vista del CEO, fingía ingenuidad y pureza, pero en realidad sus movimientos de seducción los practicaba cada noche en su habitación, tenía que seducir a su endiabladamente atractivo CEOJulien no le tomaba importancia a la bella mujercita por qué se la pasaba pendiente de Luciana y sus par de demonios, sabía que su esposa se las veía negras para satisfacer el hambre de Julián y Julio, además de cambiarlos de pañal, bañarlos y dormirlos, por eso apenas volvía a casa se cambiaba de ropa y se hacía cargo él

Al cabo de los días, Deyse seguía haciendo de todo para llamar la atención del CEO Torrenegro, el asistente António no era estúpido, él ya se había dado cuenta de las intenciones de esta mujercita, claramente estaba tratando de seducir a JulienDebido a la cesárea que le habían practicado a Luciana, los esposos no habían podido tener intimidad, como todo hombre normal, Julien tenía deseos, más cuándo llegaba a su hogar se olvidaba de todo por qué sus hijos le consumían su energía y su tiempoUna noche después de que Antonio salió del trabajo, estaba lloviendo a cántaros, Julien estaba revisando unos documentos mientras la tormenta se calmaba un poco, fue entonces que la sensual Deyse llegó con una taza de café en las manos, su perfume a rosas llegó al olfato del CEO, por primera vez notaba la bella presencia de la jovencita, la sonrisa jovial y su ingenuidadJulien bebió el café sin desconfianza, el clima estaba frío, calentarse un poco no le vendría mal— Jefe, está lloviendo demasia

Estoy irritado, me cuesta entender a la gente que llega tarde a sus citas, la paciencia nunca ha sido mi fuerte, quiero terminar con esto para marcharme a la mansión que compre recién aquí en los estados UnidosEl sonido de unos tacones atrapan mi atención, fue una gran sorpresa ver llegar a una hermosa mujer de piel apiñonada y unos hermosos ojos verdes, se nota que tiene un excelente estilo pues su traje de ejecutiva además de ser modelo le va genial, pero que no piense que con esa carita de muñeca me va a convencer, con el CEO Alemán Lenitzer no se jugaba — Buenas tardes señor Sbetovich, veo que llegó antes que yo, me disculpo por llegar un poco tarde— No me diga, tuvo un contratiempo importante — dijo el Alemán con sarcasmo — Si, así es, uno muy, muy, importante, de vida o muerte para mi bebé — Lenitzer se quedó un poco impresionar— Oh, ¿tiene un bebé? interesante— Sí, pero no es uno si no dos, son gemelos, estaba amamantando a uno de los y no se terminaba de llenar, pero bue