Hoy Loan está de cumpleaños y Céline en secreto junto con la manada le están preparando una fiesta sorpresa, ella ha ido al pueblo con Ion y un grupo de hombres más quienes son los que la escoltan para terminar de comprar algunas cosas que faltan mientras que Loan se encuentra en la ciudad reunidos con los otros Alphas tratando de los temas irregulares que ha habido en estos días. Ella entra en la tienda y compra globos y unos manteles que necesitará, camina por los pasillos y cuando se da la vuelta para regresar por algo que vio se queda inmóvil mirando a través del cristal una figura masculina que viste un traje elegante en color negro, el hombre no hace más que verla a ella con una sonrisa en sus labios y una mirada de encanto. Ella niega y desvía su mirada por un momento, luego vuelve a mirar donde mismo y continúa ahí de pies con su misma expresión.Célin

Céline entra en lo que antes era su hogar y deja las maletas a un lado de la puerta, camina hasta la sala donde decide tomar asiento y pensar en lo que hará ahora que ya no se encuentra al lado de Loan, se siente defraudada, burlada y engañada por parte de él. Sus lágrimas se deslizan por sus mejillas con abundancia, el dolor que siente en su corazón es algo complicado de descifrarlo, siente como un vacío enorme y que parte de su alma ya no se encuentra con ella, lo único que hace es pensar en Loan, no logra pensar en más nada que no sea en él. No le encuentra una razón lógica al porque tenía que enviarla lejos cuando se supone que no estará segura sin su presencia.Lo ama como a nadie amó, pero a la vez lo odia, lo sintió injusto hasta con él mismo. Céline camina a la cocina y se sirve una copa de vino, Bresco y su esposa entran a donde ella se encuen

—Vas a sufrir hijo mío — le dice su padre y Loan no hace más que reírse.—¿Tú crees? ¿Cómo sufres tu o peor? — su padre se acerca más a la reja y Loan mira su desgastado rostro.—Peor. Solo mírate, creaste tantos enemigos que todos te quieren muertos y ahora a tu mate, si yo estuviera libre ya ella no existiría — Loan se levanta y se acerca hasta donde el hombre que lo engendro.—Ese es el problema padre, que no está libre — camina en círculos — ¿Aun no te dicho verdad? Bueno… resulta que el consejo Lungun no existe, yo mismo me tome la libertad de acabar con él y con todos los que lo formaban, todo ahora es diferente, yo soy el gobernante de los lobos, soy su rey — su padre da un paso atrás.—Imposible, nosotros no tenemos rey — El asiente.—Ahora sí, de

—¿Dónde está Loan? — pregunta Bresco justo al momento de llegar, la manada se queda sorprendida por la presencia de él cuando supuestamente había muerto, ningunos de ellos comprenden lo que pasa en realidad, se sienten intrigado y a la vez molestos porque les hicieron creer algo que no era cierto. —Nos dijeron que tú y tu esposa junto la mate de Loan habían muerto, tuvimos incluso un funeral — Bresco mira a todos y entiende que debe explicar lo que sucedió en realidad. —Como todos saben la mate de Loan corría peligro, Alexandru ya en dos oportunidades se había acercado mucho a Céline, hasta entró en su mente y le hablaba, le muestra imágenes confusas que no comprendemos aun, cuando Loan se enteró que ella lo vio por segunda vez decidió sacarla del país juntos con nosotros, quiso que ese día se viera como un día común y corriente donde iríamos al pueblo por compras, lo que hizo fue estallar un auto y dentro yacían tres personas ya muertas, debía procurar que ese secre

—¿Qué es lo que hicieron? — pregunta en un susurro, Céline mantiene una expresión airada por solo verlo. —¿Nosotros? Nada, mi hermano me dio como regalo por mi regreso a mi amada alma gemela — acaricia su rostro, Bresco mantiene a Loan sujeto del brazo porque teme que se le abalance encima. “Esta vez lo matare, me comeré su corazón de ser posible Loan, mírala, nos ve con odio, como si nosotros fuésemos su enemigo ¿Qué le han hecho?” Loan no hace más que verla, se pregunta por qué lo mira así cuando ella jamás lo ha hecho, ni siquiera cuando se conocieron. —Céline — pronuncia su nombre — Mi reina — ella eleva una ceja y bufa. —No soy tu reina m*****a bola de pelo, jamás lo he sido — aquel insulto y palabras han golpeado su corazón. —Mi amor, recuerda que no debemos irrespetar a la especie lobuna — comenta Alexandru. “Se acabó, voy a matarlo” Loan cierra sus ojos y evita que Velkan salg