Emma. Mis recuerdos no son del todos claros, pero aún recuerdo el día en donde descubrí la crueldad de Luke —el rey de la ciudad de los vampiros—, no olvido el día en que conocí a Anthony —el Alpha de la manada HoneyMoon— y jamás dejaré de pensar la fecha en donde decidí odiar a la raza de los vampiros siendo mitad humana y mitad chupa-sangre. Cuando tenía 5 años me encantaba jugar en un lago en medio del bosque, para mi era un lugar mágico pero para muchos se consideraba maldito por las hadas o duendes que lo habitaban. Mi padre —Víctor—, nunca creyó que ese sitio fuera adecuado para una niña como yo, aunque nunca le tomé importancia a lo que creía. Muchos consideran que los seres mágicos son de mala suerte o de infortunio, pero a mi pensar son lo más maravilloso que existe. Vivía con el rey Luke —gobernador de todos los vampiros—, en el castillo de Transilvania. No siempre viví ahí, ya que antes junto con mi padre habitábamos una pequeña ca

Emma. No tenía derecho Luke a negarme mi alimento, es despiadado y cruel sin mencionar lo molesto que es para mi. No se como mi padre me pudo comprometer con un hombre como él, según mi progenitor quería que yo tuviera una gran vida sin falta de nada, ya que no quería que pasara pobreza como él la tuvo cuando era más joven. Aunque prefiero ser pobre antes que infeliz con riquezas. Me dirigí a mi habitación que se ubicaba en el segundo piso del castillo. Este reino tiene más de 100 cuartos, pero mi recámara fue elegida por el rey, ya que está a un lado de sus aposentos. Al llegar a mi cuarto cerré la puerta de un portazo, estaba tan enojada con Luke por no dejarme probar un bocado y más con mi padre por permitirlo, aunque es de esperarse ya que siempre está de su lado aunque me de el rey los peores castigos no hay día que este en si contra. Mi habitación era la más sencilla del castillo, pues sólo tenía una cama matrimonial con sábanas

Emma.Ruth es la vampira más hermosa de toda la villa, pelirroja con un cabello tan sedoso, una hermosa figura de su cuerpo, ojos verdes oscuros como un pino, su sonrisa tan resplandeciente y sin omitir que ella me odia como yo a ella además cabe mencionar que vive en una de las casas más costosas cerca del castillo.Se que Luke y Ruth han tenido un romance, ya que los he visto cuando se besan pero tratando de que nadie los miré. Sólo cuando Van me dice que están juntos voy a confirmarlo.—Mataré a tu informante Emma ¿Quién fue quien te dijo eso?Luke en vez de estar enojado, ahora pareciera que estuviera más bien ¿Preocupado? Tal vez le asusta que descubra alguno de sus secretos. Van apareció detrás del rubio con una mirada llena de odio hacia él, me mostró un cuchillo de oro haciendo que temiera ir la vida del rey —el oro

Luke.Eso significa que Anthony va un paso adelante de mi, no quiero besar a mi prometida si ella no lo quiere, pero el hecho de saber que alguien mas lo hizo solo deseo hacerlo igual yo, por muy mal que suene eso.Emma no puede estar besando al perro como dijo Ruth, los licántropos tienes mates así que Anthony no debe estar con alguien más que no sea su pareja. No se en donde están ya que para mi fortuna, el hombre lobo conoce más el bosque que yo aunque tenga un buen olfato. Cuando llegué la rubia hablaremos sobre todo esto.Iba a comenzar a leer el papeleo que tenía, pero volví a escuchar unos toques provenientes del padre de mi prometida. Mi relación con Víctor no es del todo amigable, ya que ambos sabemos porque hacemos esto, compartimos demasiados secretos y tratos. Se que cuando me case con su hija él se irá se aquí para no volver a molestar ya que

Emma.Abrí los ojos y no me encontré con el hombre con quien pasé la noche haciendo que me asustara un poco por despertar sola. Me levanté de la cama tallando mis ojos verdes para salir del cuarto en donde estaba y así ir a buscar a Anthony. No me asustaba estar sola pues la gran mayoría del tiempo lo estoy aunque este con alguien.Caminé entre los pasillos desconocidos ya que empecé a percibir un aroma delicioso proveniente de la cocina. Desde lejos pude observar que Anthony estaba cocinando algo en la estufa, ya que desde ahí provenía el rico olor que tanto estaba disfrutando.Me acerqué hacia donde estaba mi hombre lobo para abrazarlo por la espalda dándole un beso detrás de su cuello haciendo que se estremeciera ante mi tacto. Pude observar que había un sartén encima de la estufa en donde había trozos de carne, parecía que f