Muriel acerco la taza de café a sus labios y dio un sorbo- trabaje junto a Maxwell como forense antes de que revocaran mi licencia médica, hace tres años desapareció Victoria Emeraude sin dejar rastro, después de su desaparición seis chicas de distintos aquelarres de brujas desaparecieron de la misma forma sin dejar rastro ni pista, no sabía si era un cazador o si era un asesino serial de mujeres todas tenían en común  que eran brujas, no dije nada al consejo me guarde la información hasta estar segura de lo que pasaba para no desatar un conflicto en ese momento.Muriel sostenía la taza entre sus manos para sentir el calor del café-¿quieres decir que este tema está relacionado con Vicky?Pregunto Beatriz con curiosidad-es probable, los secuestro empezaron seis meses después de que Vicky desapareció, durante un año cada dos meses o tres meses una chica desaparecía sin dejar rastro. En dos años habían contado cerca de 11 chicas desaparecidas después del secuestr

-¿qué sucedió luego de que te fuiste con él?Pregunto Dalia a Katina, ella suspiro y continúo   -al principio todo era normal, de repente comenzó a prohibirme salir de casa decía que era peligroso pasear sola en la noche, de apoco empezó a alejarme de mis padres, aunque no me gustaba lo que sucedía creía que era normal yo ya estaba casada, empezó a quejarse de mi todo lo que yo hacía estaba mal, todas las discusiones eran mi culpa era una esposa horrible y no hacía nada bienElla tomo una pausa para secar sus lágrimas y controlar sus emociones -está bien llorar, sé que esto no es fácil para ustedComento Dalia pasando un pañuelo a la chica, ella le dio la gracia y continúo-Un día me pidió tomar una pastilla, no sabía que era y cuando pregunte me aseguro que era una vitamina, no quería tomarla pero tampoco quería que se enojara. La primera vez que la tomé pensé que iba a morir comencé a sentir taquicardia, mi cuerpo temblaba y sudaba perdiendo hast

Alonso entro a la cafetería sus ojos miraban en toda dirección buscando a Beatriz, pudo encontrarla con su vista, ella estaba sentada en una esquina del lugar, estaba concentrada leyendo una carpeta sobre la mesa, él se acercó con pasos ligeros sentándose frente a ella en silencio. Beatriz sintió su presencia y levanto la mirada-¿me has esperado mucho tiempo?Ella cerró la carpeta  -no en realidadContesto deslizando la carpeta hacia el-¿esto es de lo que me hablaste por teléfono?Ella apoyo su barbilla sobre su mano-son las pruebas que me entrego Muriel todo esta detallado en esa carpetaEl mesero se acercó con el pedido de Beatriz ella le dio la gracia y el chico se retiro-bien le enviare esto a Raphael estoy seguro que el sabrá que hacerComento Alonso abriendo la carpeta-¿Por qué tu padre y t&uac

-¿Se encuentra bien señorita? Ella negó moviendo su cabeza y apretando fuerte su herida -¿Qué sucedió? Ella apretó sus ojos con fuerza lanzando un gemido de dolor -el escapo en esa dirección Dijo Claudette señalando el oscuro bosque frente a ella El agente de la policía tomo su radio y llamo para pedir refuerzos, las demás unidades que habían llegado con el salieron de los autos de patrulla adentrándose al bosque oscuro con linternas en sus manos. Ernest corría de prisa dentro del bosque oscuro y tenebroso para evitar ser atrapado por la policía, a lo lejos veía las luces de la linternas acercarse a él, su respiración estaba acelerada y al máximo, sentía un inmenso  dolor en la herida de su brazo en cada paso que daba por escapar dejaba un rastro de sangre detrás, la oscuridad del bosque le impedía ver que tenía al frente chocando contra un árbol y cayendo al suelo, el cubrió su boca con las manos para evitar gritar de dol

La reina estaba sentada pensativa  frente a la chimenea,  en su mano llevaba una copa de vino, tenía las piernas cruzadas mirando la leña crujir y arder frente a sus ojos, el fuego calentaba la fría habitación mientras que su corazón seguía siendo frío como hielo, siempre fue una mujer fuerte y temida por todos había olvidado cuando fue la última vez que mostro debilidad, era una dama con carácter acero que jamás dudaba antes cualquier adversidad.Los pasos de su mayordomo acercándose de prisa se escuchaban en el lugar ella hizo caso omiso a su presencia y continuo tomando el vino de la copa y mirando el fuego en la chimenea  -mi señora tienes que ver estoComento el colocándose a su lado y mostrando las últimas noticias en su teléfono, en las noticias salía la imagen de una chica de pie frente a la estación de polic&iacut