29. Invitados indeseables
Una hora después
— ¿Ay, dónde estoy?
— Necesitamos hablar algo serio, Brigitte. Ahora.
— Por favor no subas la voz, ¿Qué pasa?, ¿Por qué estás alterado?
— ¿Alguien te está amenazando? ¿Qué está pasando?
— No se de que hablas, yo…—, llevó las manos hasta su rostro cubriendo su rostro avergonzada.
Andrew tomó sus manos y las retiro para que lo viera a los ojos, — No mientas más, claro que escondes algo grande.
— … Mi niña, mi gordicienta tiene un tumor y hay que operarla de emergencia antes que crezca más, pues además de producirle dolor se podría complicar y no tengo el dinero.
— ¿Por qué no dijiste nada antes?
— No quería seguir siendo una carga para Amber, ella quería vender la empresa, retirarse y quién soy yo para detenerla.
— Pero por eso no deja de ser tu amiga, estoy seguro que si lo hubieses hablado con ella te apoyaría.
— Lo sé, me equivoqué, quisiera poder volver el tiempo atrás.
— Creo que aún estás a tiempo de decirlo y salvar la amistad, lo único que no tiene so