Los días fueron pasando y la situación entre Martha y Decker no sé solucionó, de hecho se había enfriado, sin embargo, tanto Michael como yo habíamos decidido no involucrarnos, pues se trataba de dos adultos que debían saber cómo manejar su relación, pero a pesar de que entre nosotros todo iba bien nos dejaba un poco de mal sabor pues en el fondo sabíamos que compartían un verdadero interés y que solo se estaban negando la oportunidad de descubrir el amor.Michael no había todavía decidido integrarse activamente a las labores de la oficina por lo que retornamos a la rutina de trabajar desde su casa hasta nuevo aviso, así que no me enteraba de mucho de lo que ocurría en la oficina a menos que mis amigos me lo contarán, en las noches teníamos que estudiar alemán y eso también nos permitía mantenernos ocupadas, yo por mi parte lo único que podía hacer por mi amiga era estar allí para ella e intentar distraerla pues a nadie se le podía obligar a amar y era claro que Decker no iba a dar su

Mientras vamos en camino al apartamento el teléfono de Martha se enciende en varias oportunidades, es Decker quién llama insistentemente pero ella decide apagarlo, ya ha tenido suficiente de esta historia al menos por el día de hoy, ahora solo desea seguir adelante lo cuál es entendible, no hemos cenado nada y en el apartamento tampoco hay para comer pero me parece una impertinencia tocar el tema, así que me conformare con una barra energética que suelo tener en la cartera.Cuando llegamos a casa escuchamos en el cuarto de Leticia un alboroto aparentemente discutía con Elena lo que me hace pensar que los problemas no paran de llegar, esperamos un pocos a ver si podemos ayudar en algo y sale de su habitación un sorprendido Arturo que no tiene idea de lo que ocurre al igual que nosotras, justo en ese momento ambas afectadas salieron de la habitación.—¿Por qué revisas mis cosas?—Estaba en la basura del baño, si eres mi pareja al menos espero honestidad.—Yo nunca te prometí exclusivida

Cuando llego a casa esa tarde, estoy sola en el apartamento eso me permite pensar un poco en lo sucedido, si bien entiendo un poco el punto de vista de Michael también es cierto que no puedo vivir con el peso de su situación, supongo que una vez mas me equivoque o lo mío no son los alemanes, río al pensar en eso, pero ya he decretado que no más lágrimas y depresiones, soy más fuerte que eso, tomé decisiones que mal que bien me trajeron hasta aquí, estoy cansada de ser o sentirme víctima porque dejo en manos de otros mi estabilidad, así que si él no quiere intentarlo dejaré que vea lo que se pierde, en vez de llorar por los rincones me empoderare como la reina del lugar.Pongo una canción que siempre me hace sentir positiva "Esta Vida de Jorge Celedón" y comienzo a cantarla creo firmemente que si nos sentimos deprimidos debemos aferrarnos a aquellas cosas que nos hacen cambiar esa emoción, puede ser ver fotos, evocar recuerdos y para mi es cantar.… Me gusta el olor que tiene la mañana

Estoy bastante nerviosa la verdad que ni en mil años pude imaginarme en una situación así, en el camino acá varias veces dudé y estuve a punto de regresarme y cancelar esta locura, Michael parece entender mi ansiedad por lo que estrecha mi mano mientras subimos al área de las habitaciones, luego nos detenemos frente aquella que ocupe mientras me quede aquí, —Vamos a preparar todo para cuando él llegue, es alguien de confianza y sabe de qué se trata.Trato de relajarme pero ante la situación no dejo de ser aprensiva, me parece estar viviendo un capítulo de una novela de BDSM o al menos de 50 sombras de Gray y no tengo claro si me gustará, sin embargo, he sido yo quien se ha metido en este embrollo, así que lo que queda es ir hacia adelante.Entramos a la habitación y no tiene mayores cambios, excepto por unas botellitas pequeñas que parecen un aceite, un antifaz y varios pañuelos de gasa negra, me ve como miro los objetos y percibe mi inquietud, —Concéntrate en mí a partir de ahora, ¿d

Es un nuevo día en la oficina, Donatello quien le agrada Martha desde que la trasladaron de Heidelberg se mantuvo al margen porque notó cierta relación entre el jefe y ella, de hecho sus sospechas se habían comprobado una vez que los vio salir de un restaurante juntos pero ahora que se había quitado de su camino nada le impedía acercarse a ella de hecho le encantaba la idea, era la oportunidad perfecta para matar dos pájaros de un solo tiro.El se encontraba en la empresa desde cinco años antes y aunque amaba si trabajo y todo lo que había aprendido en ella no soportaba a Decker, le había llamado la atención delante de todos y se sintió humillado, era algo que no podía perdonar pues había herido su orgullo y confianza, pudo haberlo tratado en privado pero decidió usarlo de ejemplo, así que ahora usaría a Martha lo cual era evidente que era fruto de su interés para atormentarlo.Así que esa mañana estaba convencido de comenzar a armar su plan por lo que llegó al puesto de Martha y colo