- No – sentenció Balam con decisión – no doy mi bendición.
La conmoción se hizo presente en los allí reunidos, incluso sus propios hermanos no creyeron que pudiese ser tan terco. Una enfurecida Arella se levantó con enfado para retarlo.
- Que así sea Alfa Balam. Yo, la nueva Alfa del clan Deep Red Flame te reto a ti Alfa Balam por el derecho de dirigir esta manada – con esas palabras un silencio sepulcral se adueñó del lugar e incluso un estupefacto Balam contempló a la joven con estupor.
- ¿Qué estás diciendo mujer? – le preguntó Balam contrariado mientras un enfurecido Demonio rugía en su mente protestando contra la insensatez de su pareja la cual lo contemplaba segura y desafiante.
- Lo que oye Alfa – expuso Arella – si usted no es capaz de aceptar el derecho
- A ver a dónde nos lleva todo este sin sen… La loba no pudo concluir la frase la cual se vio cortada, al igual que la ensoñación de Arella, por el rugido de un muy furioso Tiverio, hecho también sin precedentes, puesto que su padre jamás dejaba salir a Tiverio ni le confería el mando a no ser que estuviese eso más que justificado y menos por una situación como la que allí tenía lugar en ese momento, una simple reunión convulsa. - Responda ahora Alfa Balam o dejará de ser bienvenido – sentenció Tiverio ante la acerada y calculadora mirada del Alfa. Balam le regaló una ladeada sonrisa de suficiencia. - Alfa Titus, no se extralimite en sus amenazas – ensanchó su sonrisa triunfal –o podría lamentarlo luego. - ¿Está amenazándome en mi propio hogar Alfa Balam? – le increpó incrédulo. - En absoluto Alfa – aclaró Balam – per
- ¿Entonces…? - murmuró Arella – no permitas todo esto y dame tu bendición.Balam la miró preso de la vorágine de emociones contrapuestas que ella experimentaba. Podía sentir cómo ella le profesaba los mismos sentimientos. Había pasión, anhelo y deseo, pero también detectaba el miedo y la frustración, así como la rabia y la incredulidad, todos sentimientos intensificados por el recién adquirido vínculo y dirigidos a su persona. No iba a cuestionarse cómo una persona podía experimentar todo aquello simultáneamente, con la misma potencia y hacia la misma persona dado que, él mismo, desde que la tenía en su vida, poseía un espíritu tan caótico y lleno de emociones como el de ella, tan pronto la estrecharía entre sus brazos para hacerla suya como la encerraría en una habitac
Tiverio se removió furioso y molesto con aquella orden disfrazada burdamente de petición, así como por aquella inapropiada actitud; no iba a permitir que aquel canalla se saliese con la suya y mucho menos cobijado bajo su techo. Serían cuatro, muy poderosos y conocidos por sus siglos de pericia militar, así como por otras de sus muchas características, no todas virtuosas y dignas de mención, pero, sin duda, bajo su techo no eran nadie, nadie más valioso que los demás allí presentes y todavía mucho menos como para poder comportarse de aquella manera sin que les pasase factura. Ante la percepción de la clara hostilidad, así como del incremento de la tensión que se palpaba en el ambiente ante aquella escena, el hermano rubio se acercó depositando su mano en la tripa descubierta del castaño lobo. Con su roce el lobo empezó a relajarse dándole paso a Titus, a&uacu
Y entonces..., la oscuridad engulló la conciencia de la joven vinculándola, a través de las protectoras llamas, con aquel dormido recuerdo..., ¿un sueño tal vez?_________________________________________________FlashbackEra una oscura y gélida noche de finales de enero, la nieve cubría el boscoso paisaje confiriéndole un aspecto invernal de ensueño sino fuese porque era noche cerrada y la luna se alzaba llena, orgullosa e imponente bañándolo todo con su blanquecina y pálida luz que lo tornaban todo un poco más tétrico y espectral como si algo o alguien estuviese al acecho tras los gruesos troncos. El silencio se veía perturbado por el persistente ulular de los búhos que, con curiosidad, observaban cómo una joven se apresuraba a adentrarse en la espesura salvaje y nevada del bosque corriendo como si su vida dependies
Sin embargo, no pudo recordar de quién eran o a qué le recordaban porque, como si de un vórtice negro se tratase, se vio engullida nuevamente por aquella inquietante escena. Una vivencia…, ¿tal vez suya?, ¿un recuerdo?, ¿algo que debía ser capaz de entender?Demasiadas preguntas agotadoras sin respuesta así que, sin pretensión alguna y drenada de toda energía, se dejó guiar de nuevo hacia la oscuridad…__________________________________Continuación del flashback…solo estaba a unos metros…, a unos pocos…Otra flecha la atravesó sin piedad haciéndola caer. En un último esfuerzo por salvarse la mujer giró sobre sí misma dejándose caer sobre su espalda para evitar que las pequeñas pudiesen golpear el suelo.Co
¿Qué le estaba sucediendo? Por lo visto, ella podía purificar y limpiar las órdenes que los demás imprimaban sobre ella gracias a las llamas que ahora dominaba y, sin embargo, en su afán por liberarse de la maldita orden que el bastardo que era su pareja le había lanzado con el fin de subyugar su propia voluntad a la de él, se había visto inmersa en un flashback que no hacía más que dejarla congelada. ¿Cómo había logrado hacer todo aquello? Ese dominio iba más allá de todo lo que era consciente que podía hacer…Pero, ¿por qué aquella visión? Si es que de eso se trataba…, ¿o sería un recuerdo?¿Quiénes eran esas pequeñas? ¿Ella era una de las dos pobres jóvenes? ¿Quiénes eran esos hombres embozados? ¿Por qué persegu
Flashback Era una oscura y gélida noche de finales de enero, la nieve cubría el boscoso paisaje confiriéndole un aspecto invernal de ensueño sino fuese porque era noche cerrada y la luna se alzaba llena, orgullosa e imponente bañándolo todo con su blanquecina y pálida luz que lo tornaban todo un poco más tétrico y espectral como si algo o alguien estuviese al acecho tras los gruesos troncos. El silencio se veía perturbado por el persistente ulular de los búhos que, con curiosidad, observaban cómo una joven se apresuraba a adentrarse en la espesura salvaje y nevada del bosque corriendo como si su vida dependiese de cada paso que daba. La niebla se arremolinaba densamente a los pies de la temerosa mujer. La joven llevaba dos fardos bien envueltos entre sus brazos. El bulto derecho, de ojos carmesí, no paraba de llorar con un llanto desgarrador y agónico, como si pudiese anticipar lo que estaba a punto de acaecer. Sin embargo, el de la izquierda, con ojos de plata fundida, se mantenía
Continuación del Flashback…solo estaba a unos metros…, a unos pocos…Otra flecha la atravesó sin piedad haciéndola caer. En un último esfuerzo por salvarse la mujer giró sobre sí misma dejándose caer sobre su espalda para evitar que las pequeñas pudiesen golpear el suelo.Como pudo empezó a mover ágilmente las manos, sin soltar a los dos fardos, e intentando trazar las líneas de un encantamiento protector, sin embargo, una oscura figura masculina se lo impidió al pisar su tobillo atravesado con la segunda flecha.La joven profirió un desgarrador chillido y ambas pequeñas empezaron a llorar al unísono como si supiesen lo que a su madre le estaba sucediendo.- Eres una desgraciada – le espetó el hombre arrebatándole el fardo de ojos carmesí que lloraba con más ahínco todavía. – Por fin nos encargaremos de esta aberración.- No, por favor – sollozó la mujer – es solo una niña, no le hagas nada – hipó intentando olvidar el gran dolor del que era presa.- Calla furcia – le respondió con d