MAURIZZIO D’AMICO

MAURIZZIO D’AMICO

Hace unos dos años atrás.

—Efraín, te había dicho que no tomaras por esta vía por qué a esta hora se forma este trancón vial, detente que llegaré más rápido si me voy a pie—, le decía a mi chófer, mientras observo mi reloj.

—Discúlpeme señor D’amico, pero al parecer ahí un accidente más adelante, déjeme tratar de salir y estoy seguro que estaré en la casa de modas en menos de cinco minutos—, me respondió.

—Vamos Maurizzio solo es un leve accidente, además que vamos más que a tiempo, y cinco o diez minutos en los que te atrases no harán la diferencia—, me contestó la mujer que iba a mi lado.

—Si quieres quédate con Efraín hasta que llegue a la empresa, mientras yo mejor voy a pie allí te espero— le dije autoritario, mientras que abría la puerta para salir del auto, debía hacerlo.

Iba caminando a toda prisa por todo el andén para llegar pronto, sentí a la mujer tras de mí, bajé un poco mi ritmo para que me alcanzara, pero lo que me detuvo fue el motivo por el cuál estaba paralizado el tráfico.

Una hermosa mujer de grandes ojos ambarinos estaba discutiendo con el chófer de un auto, que al parecer estuvo apunto de arrollarla, no sé qué pasó en mi interior pero al momento de conectar mis ojos con esa pragmática e intensa mirada todo a mi alrededor desapareció, mi cuerpo reaccionó de un modo que nunca lo había echo.

Al parecer la conexión se dio entre ambos, por qué por unos instantes en los que nuestras miradas se encuentran, ella calló y me dedicó esa profunda mirada hasta que el chófer con el que discutía sonó el claxon del auto, haciendo que desviara su mirada y dejándome a mi con una gran curiosidad, una curiosidad que debía descubrir, tenía que saber quién era esa misteriosa mujer y por qué me hizo sentir cosas que creí que no sentiría jamás.

EN LA ACTUALIDAD

MAURIZZIO

Conseguir el Amor hoy en día es una verdadera proeza, y al hablar del amor no me refiero a cualquier clase de amor, les estoy hablando de un amor puro, leal y fiel, que sea capaz de sostenerse a pesar de la adversidad, que esté para ti y contigo en tus peores momentos, que además de eso te brinde paz cuando estás envuelto en una tormenta de sentimientos y pensamientos que no te dejan vivir, mucho menos te permiten seguir adelante, esa clase de Amor que se hace llamar o es más bien conocido como el Amor verdadero.

Y ese amor no es fácil de encontrar, a veces ese amor llega a nosotros sin avisar, entra cual si fuera un huracán por eso no lo sabemos reconocer, tal vez nos llega así de repente y no nos atrevemos a darle entrada a nuestro corazón, cuando eso pasa es por qué hay muchos motivos de por medio, son cosas por las qué hemos pasado o que nos hacen, o es por que sencillamente lo preferimos ignorar.

Sea cual sea esa razón, la verdad es que eso que se conoce o se hace llamar como el amor verdadero, es bastante difícil de encontrarlo, más difícil aún es mantenerlo, es que no te llega así no más, muchos dicen que de pronto te aparece, cuando sientes una conexión con esa persona especial que toca tu mente y corazón, le dicen amor a primera vista, la realidad que ya sea a primera vista, o por qué tú has decidido buscarlo hasta encontrarlo, de ambas maneras, lo que hace perdurar esa clase de amor son los detalles más que las palabras, aun que estás cumplan un papel importante por qué debes tener poder de convencimiento a la hora de querer llegarle al corazón de esa persona que te ha hecho descubrirlo, más sin embargo lo más importante siguen siendo los detalles por qué es esa la realidad, así es como debes cultivarlo con detalles ya sean grandes o pequeños, por qué de eso se alimenta el amor, de eso sobrevive.

Cuando crees que por fin lo has encontrado o que te ha llegado de forma inesperada, es ahí donde tal vez sientes que no eres correspondido, es en esos momentos donde más te toca luchar por él, hay un determinado momento en que hasta sientes que debes comprarlo para tenerlo, pero no solo lo debes comprar con dinero, no, por qué al principio no sería tan real, sino que lo debes comprar con tú tiempo, dedicándole todas tus energías; esa lucha por obtener ese amor muchas veces requiere de hasta investigación, para sobretodo tener conocimiento de esa persona que ya has elegido para que sea tú compañera, tú pareja, tú amante, más si deseas que sea para toda la vida.

Ahora bien, ¿Y si ya lo encontraste?, ¿si ya lo elegiste?, ¿Qué tanto estarías dispuesto a pagar por él?, ¿te expondrías a apostar todo lo que tienes para obtenerlo?.

Este es mi caso, es mi vida, para la prensa, mis enemigos, la gente del común, los que tienen un poco de conocimiento sobre mí y de mi irritante personalidad, pero sobre todo para mis empleados, todos ellos saben que soy un CEO duro y cruel, que no le importa los sentimientos ajenos, que no le importa pasar por encima de cualquiera para lograr sus metas, sus objetivos, soy aquella persona que no le importa nada ni nadie para cumplir con sus deseos.

Por eso me encuentro en estos momentos en la oficina del registro civil, frente a un juez, y con mi fiel mascota y amigo Enzo, quien será mi testigo de mi verdadero matrimonio, estoy esperándola a ella, a la mujer de mi vida, a la que amé con solo verla en un fugaz encuentro y que pensé no volver a encontrarme con ella, pero que por cosas que pasan en la vida, el destino me la colocó de nuevo en el camino, una oportunidad que no pensé en desaprovechar.

Aun que por ahora nuestra unión no será la más tradicional y mucho menos se realizará por un amor mutuo, no por su parte, eso no quita el hecho que la voy a obtener.

Por ahora eso no me quita el sueño, mucho menos me importa como me vea ella ahora, lo único importante para mí es que desde el momento en que ella firme ese papel, ella será solo mía, lo será por qué desde ese mismo momento que me fijé en su brillante mirada y su fuerte personalidad, desde ese día que mis ojos cruzaron con su fugaz pero chispeante mirada, así lo decidí, a pesar de haber recién salido de un terrible y doloroso matrimonio, decidí apostarle al amor de nuevo, aun que con este acto parezca que soy un déspota e insensible, por engañarla para que se case conmigo, por ella soy capaz de todo.

Mi cautivante y ruda personalidad es bien conocida en todo París, y un poco más allá de Europa, es que al mostrar mi lado cruel ante el mundo y ante la sociedad ha hecho que sea el hombre exitoso que soy, sobre todo lo hago para aparentar la tormenta que vivo en mi propio hogar, en mi propia casa, una vida que ante la sociedad se puede considerar de perfecta, pero qué está muy lejos de la realidad.

Me llamo Maurizzio D’amico, soy dueño de una de las más prestigiosas casas de moda de Milán, además de tener como herencia todo un importante imperio empresarial que maneja un multitud de negocios tanto legales como ilegales por todo el mundo, tengo 30 años, además soy padre de un pequeño hombrecito que está próximo a cumplir sus diez años, un niño maravilloso a pesar de que nació de un matrimonio arreglado, matrimonio mismo que se acabó por azahares del destino, ya que ella falleció en un fatal accidente de tránsito cuando huía con su amante, dejando a nuestro pequeño hijo abandonado a su suerte, y a mí con una mala experiencia en el amor.

Es por eso que no quiero volver a arriesgarme a exponer mi corazón, a qué me lo rompan, no pienso volver a entregarme, ni arriesgarme a expresar ese sentimiento llamado Amor, por lo menos, no sin antes asegurarme que esa persona que he elegido, me vea cómo una persona real, que me valore por lo que soy, no por lo que tengo.

De todo lo que me ha ocurrido en mi vida en el pasado es por eso que me hice una apuesta conmigo mismo, una apuesta dónde mi objetivo es tener a esa mujer de mis sueños, no me importa lo que tenga que hacer para tenerla, no me importa si tengo que obligarla, aunque me toque comprarla, como ya la elegí me toca arriesgar el todo por el todo, he decidido apostarle al amor, como soy un triunfador, esta apuesta no la perderé.

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo