—Sara, Ábreme la puerta o la derrumbo, quiero respuestas. ¿Por qué te casaste conmigo? ¿Qué te ofreció mi padre? En el tono de voz se notaba Caspian, furioso. Por lo visto no se iba a detener. Sara no sabía qué decir o qué hacer, tampoco estaba interesada en que él supiera sobre su secreto, pero si no abría la puerta temía que la derrumbara, estaba cansada y harta dio un respiro profundo, se levantó de su cama y se dirigió a la puerta al abrirla, sintió un fuerte golpe en la frente, después no supo nada.
Cuando abrió los ojos, pudo escuchar desde lo lejos el Tono de Caspian hablándole a los médicos de forma preocupada e insistente el preguntaba si estaba bien, un médico le preguntó cuál era su relación con la mujer y el contesto es mi esposa. Qué gracioso pensó ella para sí misma. Soy su exesposa. No su esposa, pero no tenía fuerza para hablar, el golpe que recibió la había dejado sin fuerza, solo quería dormir.
Cuando Sara volvió a abrir los ojos, se encontraba en una habitación blanca. Su madre y su padre estaban allí. Se veía muy preocupados. Apenas se percataron que su hija había despertado. Le empezaron a preguntar.
—¿Sara, es cierto que te golpeaste con la puerta? o ¿ese mal nacido te golpeó? Al escuchar esa pregunta de parte del padre. Sara se dio cuenta que Caspian no le dijo la verdad, si ella hablara, probablemente se metería en problemas con Caspian. Así que prefirió seguir el juego.
—Si tu hija es algo tonta y distraída, no me percaté que la puerta se había cerrado. Y me choqué con ella, me di un golpe bien fuerte. Me sentí mareada y bueno ahora es que despierto.
—Oh, mi niña, has estado en cama desde hace 2 días. ¿Tienes hambre de seguro?
Desde hace 2 días. Me quedé en shock. Entonces no he comido, desde el desayuno. Antes del matrimonio con razón me sentía tan débil debo alimentarme. —Sí, mamá, la verdad es que tengo hambre. ¿Por cierto, dónde está Caspian? Aunque no esté realmente casada con él, tiene que estar aquí para, fingir, aunque sea. —El joven Hilton, estuvo acompañándote durante estos 2 días, tenía que presentarse hoy en una reunión de trabajo. Por eso nos quedarnos nosotros mientras él iba a la reunión dijo que volvería ahora en la tarde.
Mientras Sara comía. Su padre, el señor Ricardo, empezaba a comentarle un tema sobre su situación actual por causa del incidente.
—Tu situación actual ahora es algo compleja. Hay muchos detectives, buscando la pista sobre quién hizo las inversiones en el último minuto. Jeff está moviendo todos los hilos de contacto que tiene dentro de la bolsa de valores, Wall Street. Según los peces gordos lo que podemos hacer para borrar este hecho y que quede en el olvido. Sería renegociar la situación financiera, te quieren contratar como inversionista y que colabores en la recuperación de la crisis.
—Sólo colaborar y ayudar al sistema financiero, no me molestaría. Pero si me quieren como esclava generando para ellos, olvídalo. —Eso fue lo que le dije a Jeff, él me dijo. No la quieren como esclava, simplemente quieren recuperar lo que perdieron.
—¿De ser así, ¿cuánto fue lo que perdieron? En total, se lo devuelvo y multiplicado de ser necesario. Lo que quiero es que nadie diga mi nombre y si en tal caso alguien me acusa más adelante. Ellos lo ignoren y pasen la vista gorda como si esto nunca hubiese sucedido.
—Sabes mejor que yo Sara, que eso no va a pasar esa gente son lobos, siempre van a velar por su propio beneficio. Si ellos te conocen de inmediato, van a sacar provecho de tus habilidades a tus costillas incluso.
—eso lo tengo claro, papá, y por esa razón es que debo limpiar mi nombre y borrar cualquier rastro de aquel proceso, debo realizar algo lo suficientemente fuerte como para borrar ese incidente y posicionarme a mí y a mi gente en un lugar en la cual no nos puedan derribar fácilmente.
Y todo eso tengo que hacerlo antes que culmine este mes, antes de que Caspian anuncie nuestro divorcio oficialmente.
—¿Entonces, porque no intentas enamorar a ese sujeto? ¿Con eso consigues un poco más de tiempo, ¿no? Un hombre Alto, Delgado, tez blanca. Bastante carismático realiza dicha pregunta. — El hombre no me gusta, es demasiado narcisista, arrogante, Michael, no hagas ese tipo de broma.
—Sara vamos eres una chica bastante inteligente. De seguro logras que caiga en tus redes solamente tienes que aguantar un mes. Quién sabe, quizás él sea el que termine persiguiéndote después del divorcio. —Dudo que eso pase y ya estamos divorciados.
En ese momento, Ricardo recibe una llamada, proveniente de su trabajo. Sale de la habitación mientras se despide a lo lejos de su hija. Seguido por su esposa.
—Michael, te dejo el cuidado de Sara, cualquier cosa me dice.
—Entendido no se preocupe, señora Jimena yo me haré cargo de Sara. Hasta que su esposo aparezca. —Qué esposo, yo no tengo esposo.
—Espera, ya te divorciaste. ¿No iban a esperar hasta el final de mes? ¿Hay algo que no sepa? —Michael, 15 minutos después de Casarme, me divorcié. El hombre trajo un abogado y me obligó a firmar el acta de divorcio y a renunciar a mis derechos como esposa, no me toca nada del divorcio.
—Qué mal, yo pensaba que te ibas a divorciar al final de este mes y me tocaría, aunque sea una tajada de esos bienes, Como soy tu mejor amigo, Dice todo esto de forma graciosa y Coqueta. —Michael tú, nunca cambias, ¿verdad? Bueno, ya que estás aquí me vas a tener que ayudar.
—por supuesto que haré cualquier cosa que me pida la princesa. Menos acostarme con un hombre. —Michael, eres único en tu especie no, no quiero que te acuestes con un hombre. Quiero que arregles el problema de la Wall Street, limpia mi participación en el proceso de inversión, que causo la recesión interna de los mercados
—Sara, si yo pudiera arreglar esta cosa, ten por seguro que hace mucho tiempo lo hubiera hecho. No tendrías que haberte casado. —ahora la situación es un poco diferente, tenemos la ayuda de Jeff —¿Quién es Jeff? —Jeff Peterson es uno de los socios de mi padre tiene contacto en la Wall Street y según lo que nos informó. Están dispuestos a hacer negocios con nosotros a cambio de que le devolvamos la ganancia perdida durante el proceso con interés. —pero eso me parece injusto. Al Fin de Cuentas, tú invertiste, ellos perdieron por haber invertido en contra. ¿Así es como funciona la bolsa de valores o me equivoco?
—sí. Y en eso tú tienes razón, pero esta gente son lobos viejos con mucho poder adquisitivo e influencia y si descubren que fui yo la que hizo dicho proceso, alguien que no posee respaldo, te aseguro que me estarán cazando antes de que te des cuenta, así que sólo tengo 2 caminos, uno enamorar a Caspian hasta los huesos, cosa que la verdad quisiera evitar, porque en mi punto de vista es un mujeriego, que no tiene reparo en hacer lo que se le venga en gana y abandonar a las mujeres en su desdicha. O la segunda opción, limpiar mi nombre antes de que termine mes, con algún proceso que borre el anterior si tienes una idea acepto sugerencia.
—bueno. Aún sigo pensando que enamorar a Caspian resulta ser más sencillo que escapar de las manos de estos capitalistas, pero lo único que se me ocurre vendría siendo. Invertir en los países que fueron destruidos tras el proceso de inversión. Y ayudarlo a que se recupere utilizando tu propio nombre como respaldo y si colocas a las empresas como fuente de ingreso, te aseguro que la gente no dudará de que tus inversiones son factibles, Incluso ellos querrán invertir contigo, solamente por el buen gesto de ayudar a los países que cayeron en inicio de recesión. De esa manera, si existe un rumor o alguien te intentara a acusar en el futuro, lo pondrían en tela de juicio, porque estarías invirtiendo en esos lugares.
—Esa estrategia me parece magnífica, Michael, eres un genio, ven aquí. En ese momento le da un fuerte abrazo y un beso en la mejilla. Y para su mala suerte en ese preciso instante ingresa Caspian.
—por lo visto te ves mejor, tienes la fuerza como para abrazar y besar a un hombre. ¿Ya debería salir del hospital, no te parece? Señorita Cosette. con una sonrisa forzada, dice esto último. Mientras, le lanza una mirada fulminante a Sara. En cuanto a Michael, simplemente lo ignora.
—Eh, Sara. lo que me has pedido lo realizare de inmediato, yo te voy dejando. Buenas tardes, señor Hilton. después de decir esto último. Sale de la habitación del hospital. Mientras la pareja se queda a sola dentro de la habitación.
—¿Qué le has pedido el huesudo? —¿Huesudo? Michael es Delgado, pero tampoco están en los huesos fue lo que pensaba Sara, con una sonrisa le respondió. —no es de tu incumbencia. ¿Por cierto, creo que me debes algo, no te parece? —con la mirada fija en Sara, le cuestiona. ¿Qué te debo?
—una disculpa, me diste un puñetazo en la frente. —Es tu culpa por no avisar, sabias que estaba golpeando la puerta.
Durante un tiempo. Ambos se miraban mutuamente de forma agresiva. Era como si quisieran matarse con la mirada hasta que Caspian rompió el silencio.
—eres una golfa oportunista. —y tú un mujeriego, narcisista además de maltratador de mujeres. —No es culpa mía que abrieras la puerta en el momento en que estaba golpeándola. —¿Entonces soy la culpable de recibir el golpe? ¿Cuándo quien me lo propinó fuiste tú? Le has dicho mis padres que me golpeé con la puerta.
—si quieres que me disculpe, dime qué fue lo que le pediste al huesudo. —Lo que le haya pedido a Michael no tiene nada que ver contigo, no te preocupes. Y no espero tu disculpa, de por sí ya sé que eres un narcisista que no se hace responsable de sus acciones.Caspian, furioso por el comentario que había lanzado Sara, retrocedió un paso y después volvió a mirarle. —lo siento, Sara no fue mi intención golpearte.con la boca abierta, Sara se quedó mirándolo además de ser la primera vez que la llamaba por su nombre. No esperaba que se disculpara de hecho, su disculpa, parecía sincera por un minuto se sintió bien hasta que. Dijo lo siguiente.—pero debes de admitir que es tu culpa por haberme sacado de quicio. Y, por ende, debes hacerte responsable. —¿Que? Hacerme responsable de que. —Me arruinaste mi tiempo con Sabrina. Así que en vez de Sabrina te tocará a ti complacerme. Y ya que eres mi esposa, no creo que tengas problema. —Disculpe, Señor Hilton creo que escuche mal, no soy tu esposa
—¿entonces, porqué le dijiste que tenía que acostarse contigo si quería el divorcio? La verdad es que no te entiendo hermano. —lo dije por impulso, en un momento de cólera. Ella estaba desesperada, porque entregará los papeles de divorcio al registro civil.—Eso es extraño porque una mujer de bajos recursos estaría apurada en divorciarse de un millonario. ¿Es tonta o retrasada? —Pienso que algo más, pero no sé. Y mi padre no dice nada tampoco. Ya van varias veces que le pregunto por qué me había obligado a casarme con ella. Él sólo me responde más adelante, me lo agradecerás.—bueno, quizás tu padre vio algo que tú no has visto todavía, la mejor manera de descubrir ese algo sería conocerla más a fondo. —¿Y como tú recomiendas que vaya a conocerla? —No lo sé, intenta ser amable con ella. Tienes a un montón de mujeres en una fila esperando por ti. Y no puede ser amable con ella, pensé que tenías experiencia en esto.—No tengo experiencia tratando amablemente a las mujeres. Por lo genera
Sara no podía creer lo que escuchaba. Obviamente no quería acostarse con Caspian. Pero entre él y los perros la respuesta era obvia.—Caspian, no lo quiero hacer contigo, pero tampoco lo quiero hacer con los perros. —Es una lástima, mi paciencia se ha agotado, debes de elegir.Sara Aturdida y con el miedo a flor de piel propuso—Quiero un contrato que me asegure que te vas a divorciar de mí, apenas te entregue mi cuerpo. —Sí, eso es lo que quieres. Dentro de 2 días tendrás el contrato y esa misma noche dormirás conmigo. Y acercándose lentamente al rostro de Sara añadió. Lo que ocurrió aquí si alguien se entera, tu familia lo va a pagar. ¿Me entendiste?Sara, mirando el rostro del hombre agachó la cabeza y asintió. —también toma en cuenta que si me gusta tu cuerpo. Lo seguiré poseyendo hasta que se me dé la gana. Incluso después del divorcio. —¿de qué demonio estás hablando? Después del divorcio no tenemos nada que ver. —Estás en lo cierto, por esa razón es que quiero acostarme contigo
Mientras Sara se mantenía en silencio. Caspian, sólo se la pasaba observando cada milímetro de su rostro hasta detenerse en los labios. Sentía un gran impulso por besarlo y al ver que Sara no hablaba ni decía nada. No se contuvo.Antes de darse cuenta, Sara estaba siendo besada de forma intensa por Caspian. Y por más que luchaba. Él no la dejaba en paz. Hasta que logró zafarse por un minuto y decir. —¿Estás ebrio?Hasta ese momento, Sara no había notado que Caspian había bebido. Y él sólo respondió, mientras la sujetaba fuertemente —Aún estoy sobrio, ¿No habías dicho que yo te atraía? —Sí, pero eso fue antes, ya no me atraes ni un poco.Caspian, le sonrió. Y esto a ella le puso nerviosa. —Eso se puede arreglar. Fue lo que respondió. Sara no tuvo tiempo de refutar. Porque sus labios, otra vez, fueron presas de los deseos de Caspian, él estaba poseyendo sus labios, sin darle tregua de respirar a Sara, había introducido su lengua, hasta tocar la campanilla de su garganta.Antes de que el
¿Humor de perro? Después de pensar en esa frase, Caspian sonrió de manera sarcástica. Y se dijo para sí mismo, tienes toda la razón, estoy de humor de perro. La mujer que me gusta no siente nada por mí y estoy a punto de entregar el divorcio. ¿Cómo quieres que me sienta?En ese momento, mientras estaba pensando lejos, sobre la situación. La puerta del despacho se abrió, quien entró fue Sara. Ya sabía lo que iba a pedirle, así que se le adelanto.—Los papeles de divorcio estarán en el registro civil al finalizar la semana. No te preocupes. Dijo eso con su cara típica de póker. Aunque por dentro estaba comiéndose vivo. No quería levantar la mirada porque ver a Sara era un dolor insoportable para él. Tenía que ir desapegándose de ella a cualquier costo. Y la indiferencia parecía ser un buen camino.Por su parte, Sara, al escuchar esta declaración, se sintió satisfecha, por una parte. Pero por la otra estaba enojada. ¿Por qué estaba enojada, no era lo que quería? Se dijo a sí misma. Mient
Fuese virgen o no, no le importaba realmente. Sólo quería estar dentro de ella. Si quería que fuese amable, lo sería empezó a desvestirla y en menos de unos minutos, ella se encontraba desnuda en la cama. Siendo tocada y acariciada por todo el cuerpo Caspian, era un maestro, en el sexo no por nada era un Mujeriego. La razón, por la cual las mujeres caían ante él, no era por su riqueza, ni por su belleza, sino por cómo realizaba el acto sexual. Era dedicado, como si estuviera esculpiendo a la mujer en sí. Sin embargo, él no estaba consciente de ello.Y en ese momento, Sara se estaba dando cuenta de este hecho. El hombre la había excitado demasiado, estaba más necesitada, de lo que esperaba. Quería ser penetrada, el hombre estaba siendo demasiado lento y eso era una tortura. Pareciera como si lo hiciera a propósito. Sara, que ya no se aguantaba, empezó a abrirse de piernas y tratar de chocar su deseo, con su miembro. Caspian a darse cuenta de eso, empezó a reírse en el oído de la mujer.
El hombre le agarro ambas muñecas y las amarró encima de su cabeza. Impidiendo que pudiera moverse. En ese momento se separó de su boca por un segundo. Y le dijo. —¿Qué te pasa? Si te vas a ir, con otro hombre de todo modo, después del divorcio. Por lo menos déjame saciarme. Ya que tu primera vez, me la regalaste, no debería de importarte esto, déjame seguir poseyéndote por más tiempo. Te juro, que no te volveré a molestar después.Al escuchar lo que decía Caspian, Sara no daba crédito. ¿De quién habla, que otro hombre? De pronto, recordó las palabras que había dicho, durante la noche. Espera desde donde escucho Caspian. Sara no tuvo, tiempo de decir una sola palabra, Caspian, le atacó la boca. Impidiendo que ella pudiera hablar, su intensidad había aumentado, ya no era amable, estaba siendo demasiado rudo, como si estuviese enojado, frustrados, y se estuviese desquitando por un malentendido. La estaba penetrando, de manera salvaje, mucho más que antes. No podía seguirle el ritmo, Cas
Si no fuera, porque tengo la voz ronca y las cuerdas vocales dolidas, En este momento, estaría riéndome a carcajadas. La que debería estar celosa y enojada por una, infidelidad soy yo. Él, se la pasa con otras mujeres, cada rato, ahora que lo pienso, ah, esa tal Sabrina, él la sacó de las greñas. La última vez que la vi.Y, por cómo trató a Sabrina, asumo que trata, a las mujeres así, se veía, tan acostumbrado que no me sorprendería. A mí casi me lanza, a una Jauría.Siempre, me estaba preguntando por qué las mujeres les seguían. Ahora, ya se el porqué, tiene buen paquete y de paso, es buen amante. Además, de ser un millonario. Maldición, quiero a ese hombre, a pesar de su al genio sigue siendo guapo.En ese momento, mientras revisaba el correo, la mujer se dio cuenta de que Michael, le había enviado una notificación. ‘Me olvidé, por un minuto de Caspian y empecé, a revisar de qué trataba’.—Princesa, tenemos un problema. Uno de los ejecutivos de la Wall Street, solicita tu presencia.