Se quedó callado. Lo observaba se veía guapo, será por el tipo de ropa que llevaba de hecho se veía muy bien como el tipo de hombre que me gusta y otra vez me hacía de pensamientos tontos e inútiles, era difícil resistirse a un tipo así, creo que su silencio me gustaba más me hundía más en mis pensamientos locos a la vez me ponía pensativa sobre mi vida en ese momento. Empecé a comer más rápido quería terminar de hablar con el. Ya terminado le digo:

— Terminé habla.

Se acercó más a mi frente, eso me puso un poco nerviosa, empecé a escuchar esa melodiosa y dulce voz sobre esos labios carnosos. Me dijo en un tono dulce y amoroso:

— Yo quiero tener una amistad más estrecha contigo.

Esas palabras me paralizaron esa voz, esos ojos, no pude resistirme olvidé lo que había pasado y le dije:

— Primeramente no seré juguete tuyo, si quieres hablar y contarle a todos lo que sabes anda y ve, segundo acepto tener una ventura contigo no por miedo sino porque lo decidí.