Tras esa deliciosa experiencia que tanto había deseado desde el momento en que esa chiquilla se paró frente a él, vuelve a su casa recordando que ese par seguía ahí por lo cual debía encontrar una excusa para disculparse...
—Les pido mis disculpas, pero al parecer su tulipán ha desaparecido...— sonrío al llegar, los chicos que la estaban pasándola fenomenal con mis colegas me miran.
—¿De qué hablas?— se levanta el más alto, su preocupación llama fuertemente mi atención —¿No está contigo?— mira a su amigo.
—No creo que lo haya hecho— dice el rubio mirando a su amigo con el cejo fruncid
—Como no piensas presentarme a tus amigos me presentaré yo, soy Cassy un placer— sonríe mirando a los dos hombres que acompañaban a aquel que la ponía loca por su estúpida manera de ser. Paolo al escucharla solo sonríe.—Bueno, tu tampoco nos presentaste a los tuyos— enarca una ceja apreciando a esa mujer frente a él, ella le ignora al centrarse en quien habla después.—Soy Fabricio, un placer señorita— se presenta Filipo.—Y yo soy Kowalsky— sonríe Williams —lo sé, no tengo ni acento ni cara de ruso, soy una mezcla— dice mientras le da la mano. Rachel sonríe al escuchar esos nombres que
—Solo admiraba la magnífica belleza que está frente a mí— nota como una muy ligera sonrisa se dibuja en el rostro de ella y entonces continúa —sí, es una excelente construcción sin duda una casa hermosa, lastima de los modales de la dueña— sin poder contenerlo Rachel ríe como si fuera un chiste, Pet tenía razón él era distinto.—Eres un idiota ¿Lo sabías?— aun riendo muerde su labio, debía hacer las cosas bien, así que mirándole suspira —¿Me invitas a la tuya?— señala el jacuzzi ya preparado. Ahora el que ríe era él.—Me insultas y acusas de torturarte ¿Y ahora pretendes que te invite a mi casa? ¿Por qué haría eso? —dice esta vez ignorándola. Ella se encoje de hombros.—No tengo vergüenza, se puede decir así&mdash
Hoy es la cena con el bomboncito que vive a mi lado, nuestros encuentros sexuales en estos días no se han detenido, es muy placentero estar con él y no me voy a negar ese gusto, no hasta que lo tenga en la palma de mi mano, cosa que se me da difícil, no cae completamente ante mí y cada vez que está cerca mi cuerpo reacciona por completo a su presencia ¡Me pone de los nervios.—Chicos... Vamos a la playa— grito para que mis amigos se apresuren.—Aquí estás— escuchar esa voz provoca un escalofrío en todo mi cuerpo —¿No pensabas ir a visitar a tu padre? Ya has estado aquí por más de 2 semanas— me giro para mirarle.—Hola
—Pues yo quiero saber, a mí no me aburriría saber de tu trabajo— resopla —no sé de lo que hablas, no estoy preocupada ni siento dolor por nada— enarca una ceja al escuchar eso ¡Genial una mujer! —ya veo... Muy dominado nos salió el italiano— se levanta, por alguna razón se molesta al escuchar aquello —espero que sea buena cocinando tu capitana— dice con algo de sorna —creo que es mejor que me vaya a ejercitar, gracias por venir y hacer peor mi día— sonríe por la mentira que lo había dicho, ese hombre todo lo mejoraba.Paolo al ver su reacción un tanto celosa no puede evitar sonreír en cierto punto le gustaba y aprovechándose de eso cambie el tema dejando de lado lo del trabajo.—¿Qué puedo decirte? Supieron como dominarme y no hay vuelta atrás— ríe —oh créeme que es excelente, quedarás
—Señores esta será una noche de juerga— susurra Rachel, estaba aparentando tranquilidad, pero su mente estaba lejos de ahí —necesito un trago antes de la cena ¿Se puede?— pregunta directamente al Italiano.—Tulipán tranquilo— le pide Pet, sabía que cuando pasaban esos problemas a ella les gustaba hacerse cargo de una vez, esta cena sería algo realmente inquietante para ella.—Solo quiero un trago solo eso...— no le quita los ojos a Paolo de encima. Paolo, quien no olvidaba su angustia de la tarde y lo que había escuchado decide complacerla.—Seguro ¿Qué te sirvo? Tengo vino, Brandy, vodka, tequila, wisky... — dice
—Con la lasaña me has ganado— chilla Rachel, quien al escuchar que aquel era el postre favorito de Aquaman le miro, eso no podía ser verdad, pero cuando dice lo del vino arruga la cara —¿Será que me pueden traer jugo o un smoothie de arándanos? Si quieren lo preparo yo...—¡No!— gritan Pet y Ricardo a la vez interrumpiéndola, a Rachel se le sube el tono.—No tenían por qué decirlo de esa manera— se queja.Mientras Pet y Lu se comían con miradas uno al otro y todos pasaban de la rabieta de Rachel, Paolo sirve las copas y le da una a la testaruda.—Vamos se buena n
—Bueno querida— dice Douglas —si te lástima entonces no te ama y ciertamente nunca lo hará, solo eres un trofeo para él— sonríe y tomando el brazo de Paolo, Rachel le mira con cara de bruja.—Y eso es justo lo que eres tú para los hombres— le guiña, el ambiente era tenso así que Ricardo interviene.—Yo me adelanto con mi tulipán— les sonríe Ricardo adelantándose —quien te ve así piensa que eres una maldita bruja... Ya todo está listo, hay hora de salida— Rachel asiente a lo que dice, debía hablar con Pet, no podía distraerse ahora.Lu se sujeta a Pet completamente encantado, platicando de todo y de nada a la vez como dos adolescentes que han quedado flechados tras su primera cita.Rachel estaba maquinado que haría con esa estúpida que se infiltró <<¿Cómo pod&i
Finalmente llega la hora de partir a Colombia, la fatídica cena solo me han dado los ánimos de acabar con toda esta mierda de una puta vez.Tomamos el auto y nos dirigimos a toda velocidad a la ciudad no podemos pedir el helicóptero desde aquí, sería bastante sospechoso así que una vez en la ciudad partimos directo a Colombia.—Señora, no la esperábamos tan pronto— sacando mi arma le disparó directo a la cadera, en un lugar específico para no matarlo, pero si para dejarlo con una lesión de por vida. Miro a los demás de tal manera que si mis ojos tuvieran balas seguramente lo atravesarían una y otra vez.—¿Acaso creen que esto es un maldito juego? ¿Acaso creen que yo solamente estoy aquí para adornar? Deja de decir idioteces, que alguien me lleve con ella, y espero que esté maldito lugar este limpio como el culo de un bebé&