HENRYEs viernes y hemos estado toda la semana interrogando a posibles sospechosos, es decir, amigos y conocidos de las víctimas. Pero no hemos sacado nada de las conversaciones, todos han acabado teniendo una coartada, ya sea porque han estado con gente o por cámaras de seguridad, en consecuencia seguimos básicamente con pocas pistas sobre el asesino.—Monroe —le llamo mientras me aproximo a su cubículo— ¿Puedes venir a mi despacho?—Deme cinco minutos —me responde concentrada en lo que está haciendo.—Claro.Tarda más de cinco minutos, pero apenas me doy cuenta a causa de que estoy haciendo papeleo. Antes de entrar toca la puerta y cuando le digo que entre
Leer más