Capítulo 6

Mi cuerpo no respondía, sentía una placentera sensación al sentir los labios de Aiden sobre los míos, moviéndose de forma violenta y posesiva. 

Se separó de mi por la falta de aire, pero internamente deseaba que ese beso nunca acabará. 

Su mirada era intensa, me hacía sentir como una cría fácil de cazar. Nuestras respiraciones era todo lo que podía escucharse en aquella habitacion. 

—vendré después. —dijo fruncido levemente el ceño en señal de que estaba confundido al igual que yo.

—cl... Claro. —murmure desconcertada. 

Me encontraba tan aturdida que ni siquiera pensé en discutir para salir de este lugar.

Aiden salio de la habitación con paso seguro sin decir nada más.

¿Que m****a me paso? Me pregunté a mi misma, ¡no tenía que corresponder a ese beso! Pero se sintió tan bien... Demasiado bien, negué con la cabeza tratando de ordenas mis desviados pensamientos.

A los minutos se escucharon murmullos fuera de la habitación, así que camine hasta la puerta y pegue mi oreja para poder escuchar mejor. 

—ha pasado algo trágico. —dijo una voz masculina.

—¿que paso? —pregunto Aiden de manera fría.

—mataron a Been Lucena. —dijo con lamento. 

Lleve mis manos a la boca para no soltar un grito desgarrador, lágrimas salieron de mi rostro a causa del dolor interno que estaba sintiendo. 

Been Lucena era como un segundo padre para mi, me ayudó tanto cuando mis padres murieron. Recuerdo que siempre me llevaba ala playa para ver el atardecer. 

¿pero como carajos Aiden conoce a mi tío Been?

—tenemos que matar a los hermanos Lucena. —dijo Aiden en tono seguro.

—¿incluyendo la adoptada, Paula? —pregunto esa voz masculina. 

Negué con la cabeza con lágrimas en mis ojos, ¿Matar a los hermanos Lucena? Julie y yo somos las únicas hermanas y ¿como que adoptada? Yo soy hija legítima. 

—no de ella yo me encargo. —dijo Aiden de manera fría. 

Me aleje de la puerta rápidamente, buscando una salida a este lugar. No comprendía nada de lo estaba pasando. 

Mi familia siempre fue una familia feliz y unida, aunque mi infancia esta un poco borrosa. 

Abrí la puerta del baño y vislumbre una salida, una ventana pero no podía abrirse ya que estaba sellada. 

—genial. —murmure de forma sarcástica. 

Lleve mis manos a mi cabeza halando de el de forma suave, no sabia que hacer, ¡todo era tan confunso! No lograba comprender nada.

Aun se podía escuchar murmullos afuera así que camine nuevamente hacia la puerta pegandonme a ella. 

—¿si sabes que si matamos a los hermanos Lucena, Edward se enfadara? —pregunto de nuevo esa voz masculina.

—lose, son sus mayores socios pero mataron a Been ¡tienen que morir! —dijo Aiden enfadado.

—lose, aveces tiene desventajas ser lo que somos. —dijo el hombre con voz desanimada.

—nose tu, pero a mi me encanta.... Las balas, el dolor. —dijo Aiden con voz arrogante. 

Ni siquiera lo estaba viendo y sabía que estaba sonriendo de forma cómplice, quería gritar y maldecirlos pero no podía en esos momentos. 

¿socios? ¿Edward? ¡¿de que carajos hablan?! 

Bien quizás Julie pueda ayudarme en esto.

Fui nuevamente al baño y con paso decidió tome una toalla y envolvi mi mano en ella, me acerque a la ventana y la rompí causando un gran estruendo en la habitación. 

Por suerte había puesto seguro en la puerta y una silla que obstruía el paso, salí por la ventana causandome pequeñas heridas en todo mi cuerpo gracias a los vidrios que aún estaban en la ventana. 

—¡Paula! No te atrevas. —dijo Aiden en tono autoritario.

—¡pudrete! —grite con rabia. 

Corrí de ese lugar con todas mis fuerzas, alejándome cada vez más, dispuesta a saber que era lo que en verdad sucedía. 

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