Raymond miró a su alrededor, pero Morris no estaba por ningún lado, maldijo mientras se inclinaba para limpiarle la boca y volvió a maldecir cuando se dio cuenta de que su plato había manchado su traje, justo en ese momento, decidió que una niñera ni siquiera era suficiente para  cuidar de ella y así él va a conseguir más, pero conseguir más significa exponer su secreto y no pudo evitar dejar escapar un suspiro de frustración.

 Felicity inmediatamente saltó a su helado y Raymond no pudo evitar suspirar cuando la vio mancharse toda la cara con él, él está en eso, negó con la cabeza y rezó para que Morris simplemente regresara e inmediatamente tomó su teléfono para llamarlo.  pero lamentablemente, Morris estaba mirando todo a través de la ventana y cuando vio la llamada de Raymond, ni siquiera pensó en contestar.

 Después de que terminó su helado, Raymond tuvo que limpiarle la boca de nuevo, pero esta vez, se puso de pie y se acercó a ella, después de eso, le