ASESINO
Es la tercera partida del clueddo que voy a jugar y este tendrá un invitado especial. Me preparo bien para darle la bienvenida y voy a buscarlo.
Primero empiezo por su casa que está en la calle Fuenterrabía número 16 piso 3 A, fuerzo la puerta con sumo cuidado y me pongo a buscarle, pero no lo encuentro, tan solo veo la silueta de una mujer en la cama por lo tanto me dirijo a la salida, cierro la puerta de la manera más silenciosa posible y me dispongo a peinar las calles para encontrarle.
Me lleva casi toda la noche dar con él, pero cuando lo encuentro casi no puede ni poner resistencia así que lo meto en el coche y me lo llevo a la casa de los juegos. Los demás participantes ya están allí esperándonos listos para empezar.
HENRYHa pasado bastante tiempo desde los últimos asesinato y todo está muy tranquilo, es como la calma antes de la tormenta. Estoy seguro de que el asesino volverá a matar dentro de poco.—Monroe —le llamo.Nada más entrar a la comisaría me dirijo a su cubículo para avisarle de que voy a la sala donde tenemos toda la información.—¿Se ha puesto en contacto señor? —me pregunta Monroe nada más entrar en la sala y cerrar la puerta.Hasta ahora hemos estado recibiendo cartas anónimas que nos indican el lugar de los asesinatos, nunca tienen dirección del remitente ni ninguna huella por ende suponemos que son del asesino o un cómplice.
Eran las cinco de la mañana cuando decidió que era hora de volver a casa, ya que ellos o mejor dicho ella se levantaría en breve para ir a trabajar.—Mierda —maldijo.Había intentado no hacer ruido para no despertarles, pero al ir en una oscuridad completa no se había percatado ni había recordado donde estaba la mesilla con los jarrones. Así que cuando llegó a ese punto y golpeó la mesilla haciendo que estos repiqueteasen no pudo más que maldecir.Estaba llegando a su habitación cuando el pasillo se iluminó y al darse la vuelta la vio.—¿Dón
HENRYEstoy de camino al despacho de Jiménez, cuando veo que está dando órdenes a los policías para que vayan a casa de las víctimas a dar la noticia.—Iré yo a darle las noticias a la mujer de Hernán —le digo sin explicaciones.—No, tu quédate investigando —me ordena Jiménez sin mirarme.—Señora, es mi padre —le explico haciendo que se sorprenda— quiero ser yo el que se lo comuniqué a mi madre.Tengo un nudo en la garganta que me impide hablar mucho, ya que ella va a sufrir mucho con la noticia.—Oh, lo siento mucho —lamenta girándose y apoyando una mano en mi hombr
HENRYEs viernes y estamos a punto de empezar la misa para el entierro, él no tenía muchos amigos, pero mi madre sí, de manera que nos reunimos unas cincuenta personas, contando también con algún amigo mío y algunos policías.Estos últimos dos días me he quedado a dormir con mi madre en vista de que me necesita. Durante toda la misa la pobre no hace más que llorar y en algún momento las lágrimas vienen por verla así, pero me niego a llorar y que la gente interprete que es por él. Después de recibir el pésame de todo el mundo estamos yendo a la salida cuando veo a Evelyn.——Mamá —llamo —llamo su atención—— quiero presentarte a alguien. ASESINOMe estoy preparando para otro juego cuando alguien toca mi puerta. Al abrir me fijo en que se trata de un grupo de niñas.—Buenas tardes —me saludan todas a la vez.—Buenas tardes.—Estamos vendiendo estas galletas para recaudar dinero —me explica una niña bajita con las mejillas regordetas, rubia de ojos azules— ¿Quieres contribuir?—Claro pequeñas —les sonrio— esperad a que vaya a por mí cartera.Me han caído en gracia así que les compro diez euros en galletas, después se despiden dándome las gracias y se van a tocar otra puerta.PoCAPÍTULO 29
HENRY—Señor —me llama Monroe nada más entrar por la puerta.Hoy he llegado antes de tiempo, para ser preciso a las siete y media, pero ella ya está aquí.—¿A qué hora has llegado? —le pregunto extrañado.—A las siete, ¿por? —me responde distraída.—Sabes que nuestro horario de trabajo empieza a las ocho, ¿verdad? —le pregunto mientras cierro la puerta pues nos dirigimos a la sala donde tenemos toda la información recopilada.—Estaba inquieta y no podía dormir así que he venido antes —me explica bajito mientras pasamos los cubículos de nuestros co
HENRY Después de esperar unos diez minutos a que Drake llegue, no perdemos ni un minuto más, cuando se sienta en su asiento detrás del ordenador. —Necesitamos encontrar la dirección de alguien —le explico. —Bien —me responde mientras enciende el ordenador para poder buscar— ¿Nombre y apellidos? —Pablo Delgado Flores —le responde Monroe leyendo en su libreta. Una vez que el ordenador se enciende y mete el nombre en la base de datos, no tarda ni un minuto en darnos la información. —Ya está. —¿Qué? —pregunto conmocionado por su rapidez. —Este tipo está en el sistema —explica como si fuera obvio.
ASESINOEstoy organizando el siguiente clueddo eligiendo a los participantes cuando decido ir a ver donde viven y sus costumbres para saber qué momento es el idóneo para secuestrarlos sin levantar sospechas hasta que sea demasiado tarde.Estoy siguiendo a Lucía Guapo a la salida de su trabajo cuando se da cuenta de que le sigo de manera que me enfrenta.—¿Quieres algo? —me pregunta cabreada.—¿Perdón? —hice como si no entendiese.—Me estás siguiendo, así que para si no quieres que llame a la policía vete —me amenaza con el móvil en la mano.—En realidad, voy al bar Christie que está a