Marcus
Veo como Katherina quiere huir de nuevo, la tomo del brazo antes de que lo logre, su cuerpo comienza a temblar y sus ojos están llenos de lágrimas, maldita sea con mi madre y su boca, la abrazo a mi cuerpo para que se tranquilice.
—Madre dame un momento. —pido con la poca paciencia que tengo.
—Marcus yo no quise ofenderla. —sé que mi progenitora no quiso, pero debe cuidar su boca delante de mi mujer.
—Lo sé madre, —le doy una corta sonrisa. —Ve, ahora vamos. —asiente avergonzada.
Se marcha dejando con esta chiquilla temerosa, la alejo para ver esos ojos que se han puesto verdes, ¿cómo diablos cambian de color?, limpio las lágrimas que caen por su bello rostro.
—No puedes llorar por todo, —acaricio sus pómulos. —Y mucho menos huir, ¿entiendes? —pregunto con suavidad.
—No le
KatherinaMe quedo sola con Yuri y Anna, mientras Marcus se va con su padre, me pongo un poco nerviosa con ese hecho, pero debo acostumbrarme a estar sin el ruso no puedo seguir dependiendo de él a cada instante.Miro como mi suegra termina de preparar la comida una que me ofrecí hacer, pero se negó alegando que soy la visita que ya tendré tiempo para preparar un almuerzo, con Yuri tenemos bastantes cosas en común, amamos el arte, me contó que estudiara en la universidad de bellas artes de aquí me gustaría hacer lo mismo, sin embargo debo hablar con Marcus no creo que se niegue, pero igual quiero estar segura a la hora de emprender una carrera y me gustaría sentir su apoyo.—Ahora vengo. —anuncia Yuri sacándome de mis pensamientos.—No te pierdas niño. —su abuela lo señala con una cuchara.—Si señora. &mdas
MarcusSus ojos grises clavados en mis verdes después de hacerle el amor, es lo que más amo, ¿La amo?, vuelvo a mirarla y sé la respuesta a esa pregunta.—Te amo, —murmuro sobre sus labios. —Te amoKhrustal´nyy tsvetok (flor de cristal). —una lágrima cae por su mejilla y recibo un pequeño golpe de parte de ella en mi hombro.—Me asustaste, —susurra con una sonrisa. —Te amo. —deja un beso en mis labios, tan dulce y tierna como solo ella puede ser.—¿Por qué dices que te asuste? —pregunto saliendo de su interior.—Creí que te habías aburrido de mí y bueno yo... —comienza a retorcer sus dedos con la mirada baja, así que corto su drama.—Katherina acabo de decirte que
KatherinaFaltan dos días para quemi madre llegue a suelo ruso, y se desate una guerra, Victor no estará feliz, sin embargo mi progenitora aseguro tranquilizarlo y espero pueda lograrlo.Estoy en la cafetería de la empresa almorzando sola, ya que Marcus tenía una junta y no podía posponerla, las miradas que me dan son desagradables, me ven como la amante, la usurpadora, la que quiere el dinero de Marcus y la empresa Lébedev la cual es de mi familia, sin embargo no me pondré a explicarles quien soy, no les debería de importar.Levanto la vista de mi plato cuando una mujer de cabello negroque reconozco bastante toma asiento con otra de cabello rojizo, sus miradas de superioridad me dan escalofríos, sé que son ellas las que han comenzado los rumores, me lo han dejado enclaro.—Mira quien está aquí. —habla la cas
MarcusComienzo a ver rojo por las palabras de Natasha, mi sangre hierve con rabia acumulada no solo por como insultan a mi flor de cristal, sino también por todos estos años de torturas que aguante por mi hijo, pero no más.—¿Con qué derecho te atreves a llamarla así? —doy un paso en su dirección.—Con el derecho de ser tu esposa. —la loca me sonríe con superioridad.—Una esposa que metía un hombre diferente en nuestra cama cada día, —me acerco a ella amenazante. —Una esposa que me robo para irse con su amante de turno, —escupo con rabia. —Una esposa que tiene un hijo y no sabe quién es el padre por ser una puta. —levanta su asquerosa mano para golpearme, sin embargo la tomo antes de que eso ocurra.—Eres un poco hombre, &nbs
MarcusDespierto temprano entre los brazos de Katherina o más bien ella entre los míos, su cuerpo tibio encima del mío su rostro inocente, hace que mi corazón de hielo se derrita por completo, está mujer a cada instante logra cosas que no creí posible, todo ella es una hermosa flor de cristal.La alejo un poco de mí para poder ver esos labios rosados entre abiertos respirando suavemente, estoy tentado a besarlos, no hay nada más que desearía en este momento, sin embargo tengo otros planes así que debo contener la necesidad de apoderarme de ellos.Me levanto suavemente sin hacer ruido, no quiero que se despierte y arruinar la sorpresa que tengo preparada, la observo y no puedo creer que tenga tan hermosa mujer en mi cama, he estado con bellas mujeres sin embargo Katherina a mi parecer rompe todas las barreras de belleza, no hablo solo de su físico que un idiota no
KatherinaMarcus tiene una mirada triste, sin embargo es demasiado lo que ha hecho, no puedo aceptar su regalo por más que me haya encantado.—Marcus es hermoso, —le doy la caja la cual no agarra. —Pero es una locura debe salir una fortuna. —niega pasando sus manos por la cara.—¿Qué importa cuanto cueste Katherina? —sus ojos verdes se clavan en mí. —Lo importante es lo que significa. —arrugo mi ceño sin comprender.—¿Significa? —pregunto desconcertada.—Es una flor de cristal, —toma la caja yvuelve a sacar el hermoso collar. —Lo mande hacer para ti hace un tiempo. —se acerca a mí y me lo muestra.—¿Por qué me lo das hasta ahora? —me da una sonrisa corta.—Soy un cobarde. —su respuesta me descoloca. —Se que eres más feliz con el os
MarcusEstamos yendo al aeropuerto por la madre de Katherina y de ahí a la casa de Victor para la cena de cumpleaños de miKhrustal´nyy tsvetok (flor de cristal),solo ruego para que no se desate la guerra, aunque conociendo a mi amigo se que es capa de golpearme por más que su situación no sea la mejor, hablando de eso debo decirle la verdad a la chiquilla, ya está sospechando y no quiero que se enoje conmigo aunque lo hará igual por ocultarle el estado de salud de su padre.Le doy una mirada de soslayo y va con la vista perdida por la ventana, se que tiene miedo al rechazo de su padre con respecto a nuestra relación, cosa que sucederá, Victor es un hombre de carácter el cual cree en la amistad y yo la he traicionado metiéndome con su hija una chiquilla para mí, sin embargo en mi defensa nunca dijo que era hermosa al punto de volver loco a cualquier h
KatherinaMi padre y Marcus se retan con la mirada, ahora es que creo que no fue una buena idea decirle la verdad y menos el día de mi cumpleaños, mi progenitor está débil y muy enfermo, no es el hombre de casi cuarenta años joven y fuerte que conocí, salgo de mis pensamientos cuando escucho la voz de mi madre.—Victor cálmate, —lo toma del brazo y lo arrastra hasta la silla. —No te hará bien. —le da una cálida sonrisa.—¿Cómo me pides que me calme? —la mira a ella y después a mí. —Si mi hija me ha estado viendo la cara, con mi mejor amigo. —no respondo nada a todo su drama. —Me has mentido. —me señala con su dedo.—Victor déjala tranquila,—Marcus es el que habla. —La culpa es toda mía. —arrugo mi ceño por la estupidez que dice.