Katherina
¿Por qué me traiciono?, confíe en él, le pedí que no digiera nada y fue lo primero que hizo, mi tío le dirá a mi padre y él a mi madre, mi progenitora me matará por mentirle todo este tiempo, no entenderán las razones, ni yo lo hago.
—¿Qué te sucede? —pregunta mirándome.
—Nada. —esquivo su mirada.
—Dime que mierda tienes, —me tomo del brazo acercándome. —¿Por qué estás enojada? —niego temblorosa. —No lo niegues y no te haré nada. —me suelta y vuelvo a respirar tranquilamente.
—Le dijiste la verdad a mi tío, —susurro con lágrimas en mis ojos. —Te pide que no lo hicieras y fue lo primero que hiciste, —comienzo a llorar. —Me traicionaste. —mi voz sale en un débil susurro.
Ma
MarcusDespierto por los rayos de luz que entran por el ventanal del dormitorio, parpadeo para acostumbrar a mis ojos, busco el calor de la mujer que no deje dormir anoche por hacerle el amor, pero no la encuentro, arrugo mi ceño molesto, cualquier mujer hubiera amanecido entre mis brazos tratando de conseguir más de mí,cosa que nunca han logrado, sin embargo Katherina es diferente siempre me está sorprendiendo.Me levanto de mal humor, ingreso al baño y tampoco está, decido darme una ducha y buscar a esa chiquilla malcriada, cuando termino de bañarme salgo al cuarto envuelto en una toalla, busco ropa que ponerme para poder ir a la oficina, cuando encuentro un traje negro con camisa blanca me los coloco, con las medias y zapatos, busco mi reloj de muñeca, acomodo mi pelo largo y por último me coloco perfume, estoy listo para buscar a mi mujer.Salgo del cuarto y me dirijo a las
KatherinaSalgo corriendo de la empresa, con rumbo desconocido, ya que no conozco a nadie aquí, sin embargo no me importa, solo quiero alejarme lo que más pueda de Marcus y sus mentiras. Dice que las odia y él ¿qué ha hecho?, mentirme, eso hizo.Llego a la esquina y cruzo sin mirar la calle, me detengo en el acto cuando siento una bocina ser tocada y una frenada que me deja estática en mi lugar, busco con la mirada quien casi acaba con mi vida, un deportivo rojo de vidrios negros es lo primero que veo y lo segundo es una mujer bajando del mismo, una morocha que parece modelo de revista me mira con el ceño fruncido.—¿Te has vuelto loca? —es lo primero en preguntar cunado llega a mi lado, niego bajando la mirada. —Podría haberte pisado. —anuncia enojada y ¿cómo no?, si soy una torpe.—Disculpe señora, —susurro avergonzada
Marcus—Estoy llegando. —corto la llamada con Nikolay, esa chiquilla está en su casa.Acelero mi deportivo para castigar a esa mujer, me tuvo todo el día de aquí para haya, pensando que le había pasado cualquier cosa, no le importo dejarme como un idiota en el medio de la calle llamándola,se fue con una desconocida, esta completamente loca. ¿Por quésiempre debe huir?.Freno en un semáforo recordando a esa maldita mujer, Natasha volvió para joderme la vida y no me dejará tranquilo hasta que lo logre.Flashback—¿Qué haces aquí? —pregunto tocando los botones del ascensor.—Necesito dinero. —suelto una carcajada sin humor.—Lárgate Natasha por tu bien no vuelvas, —le doy una mirada de soslayo. —Y firma el m
KatherinaHa pasado un mes desde que Marcus me contó que eracasado y tiene un hijo de mi edad, por un momento me sentí incómoda con la situación, ¿Qué pensará de qué su padre está con una chiquilla?, espero que no le moleste, no me gustaría llevarme mal con él.Marcus se abrió a mí contándome cada cosa que ha hecho Natasha con tal de sacarle dinero, nunca crío a Yuri, lo hicieron sus abuelos paternos que lo adoran, ya que es su único nieto, por más que no lo sea ellos lo aman igual y eso habla muy bien de ellos.El pequeño era dejado solo por su madre mientras ella salía y gastaba lo que debía usar para criarlo, cuando se descubrió lo que hacía fue muy tarde, el niño sufrió un accidente en su casa una noche que se encontraba solo, resbalándose en el baño y golp
MarcusVeo como Katherina quiere huir de nuevo, la tomo del brazo antes de que lo logre, su cuerpo comienza a temblar y sus ojos están llenos de lágrimas, maldita sea con mi madre y su boca, la abrazo a mi cuerpo para que se tranquilice.—Madre dame un momento. —pido con la poca paciencia que tengo.—Marcus yo no quise ofenderla. —sé que mi progenitora no quiso, pero debe cuidar su boca delante de mi mujer.—Lo sé madre, —le doy una corta sonrisa. —Ve, ahora vamos. —asiente avergonzada.Se marcha dejando con esta chiquilla temerosa, la alejo para ver esos ojos que se han puesto verdes, ¿cómo diablos cambian de color?, limpio las lágrimas que caen por su bello rostro.—No puedes llorar por todo, —acaricio sus pómulos. —Y mucho menos huir, ¿entiendes? —pregunto con suavidad.—No le
KatherinaMe quedo sola con Yuri y Anna, mientras Marcus se va con su padre, me pongo un poco nerviosa con ese hecho, pero debo acostumbrarme a estar sin el ruso no puedo seguir dependiendo de él a cada instante.Miro como mi suegra termina de preparar la comida una que me ofrecí hacer, pero se negó alegando que soy la visita que ya tendré tiempo para preparar un almuerzo, con Yuri tenemos bastantes cosas en común, amamos el arte, me contó que estudiara en la universidad de bellas artes de aquí me gustaría hacer lo mismo, sin embargo debo hablar con Marcus no creo que se niegue, pero igual quiero estar segura a la hora de emprender una carrera y me gustaría sentir su apoyo.—Ahora vengo. —anuncia Yuri sacándome de mis pensamientos.—No te pierdas niño. —su abuela lo señala con una cuchara.—Si señora. &mdas
MarcusSus ojos grises clavados en mis verdes después de hacerle el amor, es lo que más amo, ¿La amo?, vuelvo a mirarla y sé la respuesta a esa pregunta.—Te amo, —murmuro sobre sus labios. —Te amoKhrustal´nyy tsvetok (flor de cristal). —una lágrima cae por su mejilla y recibo un pequeño golpe de parte de ella en mi hombro.—Me asustaste, —susurra con una sonrisa. —Te amo. —deja un beso en mis labios, tan dulce y tierna como solo ella puede ser.—¿Por qué dices que te asuste? —pregunto saliendo de su interior.—Creí que te habías aburrido de mí y bueno yo... —comienza a retorcer sus dedos con la mirada baja, así que corto su drama.—Katherina acabo de decirte que
KatherinaFaltan dos días para quemi madre llegue a suelo ruso, y se desate una guerra, Victor no estará feliz, sin embargo mi progenitora aseguro tranquilizarlo y espero pueda lograrlo.Estoy en la cafetería de la empresa almorzando sola, ya que Marcus tenía una junta y no podía posponerla, las miradas que me dan son desagradables, me ven como la amante, la usurpadora, la que quiere el dinero de Marcus y la empresa Lébedev la cual es de mi familia, sin embargo no me pondré a explicarles quien soy, no les debería de importar.Levanto la vista de mi plato cuando una mujer de cabello negroque reconozco bastante toma asiento con otra de cabello rojizo, sus miradas de superioridad me dan escalofríos, sé que son ellas las que han comenzado los rumores, me lo han dejado enclaro.—Mira quien está aquí. —habla la cas